- Antimonumenta Vivas nos Queremos señala que Marisol Figueroa fue detenida “sin orden de aprehensión, sin ningún motivo”, por policías ministeriales, quienes la torturaron y la golpearon para que confesara que andaba con “malandros”
Jesús Saavedra
La organización “Antimonumenta Vivas nos Queremos”, envió un escrito a la gobernadora Evelyn Salgado Pineda y a la fiscal Sandra Luz Valdovinos Salmerón, en el que denuncian la detención “extrajudicial” de Marisol Figueroa Núñez, hija de la activista y profesora Marisela Núñez Trujillo.
Este fin de semana, esa agrupación que tiene su sede en la Ciudad de México y aglutina a diferentes organizaciones de Colectivos de familiares de desaparecidos, emitió un comunicado dirigido a “las mujeres organizadas, colectivas feministas, a los medios de comunicación, personas solidarias”.
Pero también está dirigido a la gobernadora y la fiscal, a quienes lespiden su intervención y que atiendan esta denuncia de graves irregularidades en la detención de Marisol Figueroa Núñez.
Informaron que el pasado jueves 2 de marzo a las 8 de la noche, en el centro de Chilpancingo “fue detenida extrajudicialmente la compañera Marisol Figueroa Núñez por la Policía Investigadora Ministerial (PIM)”.
Sostienen que la detención de Marisol se realizó “sin orden de aprehensión, sin ningún motivo, la subieron a una camioneta, le dieron vueltas durante un tiempo, la torturaron, le pegaron con un arma larga en la cara”.
Denunciaron que los agentes de la PIM que la detuvieron extrajudicialmente, “luego la llevaron a una casa donde había una excavación y la querían obligar a señalar a un individuo como responsable del homicidio de un hombre al que, dijeron, le había cortado la cabeza”.
Indican que posteriormente llevaron a Marisol a los separos de la PIM, que tiene en las instalaciones de la Fiscalía General del Estado en Chilpancingo, “donde la tuvieron incomunicada durante varios días”.
Marisol es hija de la profesora Marisela Núñez Trujillo, quien de forma consistente, desde septiembre del 2014, ha acompañado las marchas y movilizaciones de los padres de los 43 muchachos desaparecidos en Iguala y a quien se le conoce como “la tía Marchas”.
Informan que al no tener informes de su hija, doña Marisela Núñez Trujillo “salió a buscarla y logró que testigos que vieron cómo la había levantado la policía le dijeran lo que había sucedido, por lo que se dirigió a la Fiscalía del Estado a exigir su presentación”.
En el documento se señala que el 7 de marzo, la maestra Marisela tuvo noticias de su hija, estaba en los separos, donde le dijeron que estaba detenida porque “andaba con malandros” y en la venta de droga, además que le había pegado a una ministerial, pero que “fue liberada e inmediatamente le fue ejecutada una orden de aprehensión por homicidio”.
Añadieron que Marisol se encuentra detenida en el penal de Chilpancingo en espera de que se defina su situación jurídica ante las acusaciones que ha hecho la FGE en su contra.
Por ello piden a la gobernadora y la fiscal que analicen su situación jurídica y las graves irregularidades cometidas por policías ministeriales durante su detención.