- Estudiantes de varias normales marcharon en Chilpancingo para exigir justicia por los asesinatos de Alexis Herrera y Gabriel Echeverría, muertos a balazos durante un desalojo violento el 12 de diciembre de 2011
- Al pasar por las oficinas del PRD abrieron un boquete en una pared para poder ingresar y romper ventanas, mobiliario y lanzar bombas molotov en el interior
- Por la tarde se enfrentaron contra policías estatales en el Libramiento a Tixtla; reportan a un mando policiaco herido, además que habría dos normalistas heridos y otros dos desaparecidos
Jesús Saavedra/Redacción
Normalistas de Ayotzinapa vandalizaron, por enésima ocasión, la sede estatal del Partido de la Revolución Democrática, en Chilpancingo, donde causaron cuantiosos daños, y por la tarde se enfrentaron contra policías del estado que les impidieron robar un par de vehículos que pretendían llevarse a sus instalaciones, en el Libramiento de cuota a Tixtla. En este altercado, el coordinador de la Policía del Estadoresultó lesionado y tuvo que ser hospitalizado, informaron las autoridades estatales.
Como lo habían anunciado desde la semana pasada, este lunes más de mil estudiantes de diferentes normales del país, maestros de la CETEG y miembros de organizaciones sociales marcharon para exigir justicia por los asesinatos de los estudiantes Jorge Alexis Herrera Pino y Gabriel Echeverría de Jesús, ocurridos el 12 de diciembre del 2011, durante un desalojo violento en El Parador del Marqués, en Chilpancingo, porque es un hecho que no se ha esclarecido y menos castigado.
La marcha comenzó en la avenida Insurgentes, al norte de la capital, y en su recorrido pasaron a las oficinas del Comité Estatal del PRD, en la avenida Alemán, donde con un pico los normalistas abrieron un boquete en la fachada del inmueble debido a que no pudieron derribar la puerta porque fue reforzada.
Ya en el interior, el grupo de alrededor de 50 estudiantes que llevaban sus rostros cubiertos, rompió ventanas, quemó papelería y detonó más de seis cohetones.
La marcha
Este lunes, los normalistas de Ayotzinapa viajaron a Chilpancingo con el apoyo de estudiantes agremiados a la Federación de Estudiantes Campesinos Socialistas Unidos de México (Fecsum), a bordo de más de 20 autobuses del servicio de transporte de pasajeros que tienen en su poder, y se unieron a esa movilización maestros de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación en Guerrero (CETEG) e integrantes de Colectivos de Desaparecidos y de sindicatos.
Informaron que la marcha se llamó “12 de diciembre no se olvida” e invitaron a que participen quien desee sumarse a la exigencia de justicia en este caso.
Recordaron que en diciembre del 2011, el comité estudiantil y la base de normalistas “buscaba una reunión para resolver el pliego petitorio en el cual se pedía un aumento de matrícula, que era la demanda prioritaria, además de otros puntos relacionados con la comunidad estudiantil”.
En aquella ocasión, los normalistas marcharon y bloquearon la Autopista del Sol en el sitio conocido como El Parador del Marqués. A ese ligar llegaron elementos de la Policía Federal y del Estado, quienes los desalojaron de manera violenta.
Por su parte, los normalistas incendiaron una de las bombas despachadoras de gasolina en la estación de servicio Eva, por lo que uno de los empleados de esa gasolinería, Gonzalo Rivas, resultó con graves quemaduras en el cuerpo al accionar el mecanismo para que no ocurriera un estallido del combustible. Varias semanas después, el trabajador falleció.
Durante el desalojo, elementos de la PF realizaron disparos en contra de los normalistas y mataron a dos de ellos, Alexis Herrera y Gabriel Echeverría, cuyos cuerpos quedaron tendidos sobre la cinta asfáltica de la Autopista del Sol.
También llegaron elementos de la Policía Ministerial, a quienes se les responsabilizó de realizar los disparos en contra de los normalistas, pero después de varios meses recuperaron su libertad y hasta la fecha nadie ha sido castigado como responsable directo o indirecto de esos hechos de violencia.
El entonces secretario de Seguridad Pública, Ramón Almonte, y el procurador de Justicia, Alberto López Rosas, renunciaron a sus cargos días después del desalojo.
Durante la marcha, los normalistas reprocharon que 11 años después de los asesinatos de sus compañeros, “hasta hoy la impunidad persiste”.
Luego del ataque contra las oficinas estatales del PRD, los normalistas y acompañantes siguieron su camino hasta el bulevar Vicente Guerrero hasta llegar al sitio conocido como El Parador del Marqués.
En ese lugar depositaron dos coronas de flores en memoria de los dos normalistas asesinados, colocaron dos féretros de cartoncillo para recordarlos y traían consigo 3 monigotes que representaban al exgobernador, Ángel Aguirre Rivero; al expresidente, Enrique Peña Nieto y al exsecretario de Seguridad, Ramón Almonte Borja.
Ahí, mientras bloqueaban la circulación de vehículos en esa vía federal, el sacerdote José Filiberto Velázquez Florencio ofició una misa en la que lamentó que persista la impunidad por el asesinato de los dos estudiantes. “Nadie está sujeto a proceso y menos ha sido castigado por esos hechos de represión”, aseguró.
Luego hablaron normalistas de Ayotzinapa, dirigentes de la Fecsum, de la CETEG y de los Colectivos de Desaparecidos, quienes exigieron “justicia” y reprocharon que el exgobernador Aguirre Rivero “siga viviendo de manera tranquila e insistiendo en hacer vida política en el PRD o en cualquier partido”.
Aseguraron que “sobre su conciencia” pesa la sangre de los normalistas Jorge Alexis Herrera Pino y Gabriel Echeverría de Jesús, pero también de la desaparición de 43 compañeros en Iguala en septiembre del 2014”.
El bloqueo en la Autopista del Sol se prolongó durante poco más de una hora y al concluir el mitin, los normalistas quemaron los tres monigotes que llevaban en esta manifestación.
Enfrentamiento con policías estatales en el Libramiento de cuota a Tixtla
Alrededor de las 6 de la tarde, elementos de la Policía del Estado encabezados por su coordinador regional, Daniel Hernández Arena, intentaron impedir que los normalistas robaran varios vehículos, un tráiler cargado, una camioneta Nissan con rótulos del INEGI y un autobús de pasajeros de la empresa Futura.
Durante el incidente registrado sobre el Libramiento de cuota a Tixtla, a la altura del sitio conocido como Los Túneles, los normalistas atacaron a los policías estatales con piedras y un artefacto explosivo que explotó en el cofre de la patrulla en la que viajaba Daniel Hernández.
Los uniformados repelieron el ataque realizando disparos al aire y lograron recuperar el tráiler, mientras que las otras dos unidades se las llevaron los estudiantes a su plantel ubicado en Tixtla.
El mando policiaco fue trasladado a un hospital para que recibiera atención médica y hasta las 9 de la noche se desconoce cuál es su estado de salud.
Además, 4 elementos de la policía estatal fueron retenidos por normalistas
“Aproximadamente a las 19:25 horas de este lunes, dos patrullas de la Unidad de Fuerzas Especiales de la Policía Estatal circulaban por dicho libramiento, cuando fueron interceptados y chocados de frente por un autobús de pasajeros, en el cual se trasladaban presuntos estudiantes”, informó la Secretaría de Seguridad Pública estatal, que además expresó su rechazo “de forma contundente está agresión y exige se respeten las garantías de los compañeros policías”.
Habría dos normalistas heridos y otros dos desaparecidos
Por su parte, el vocero de los padres de los 43 normalistas desaparecidos en Iguala, hace 8 años, Melitón Ortega, denunció que fueron los policías estatales quienes agredieron a los normalistas de Tiripetío y que dos de ellos están heridos y otros dos estaban desaparecidos durante el luego del enfrentamiento ocurrido en el Libramiento a Tixtla.
Explicó que alrededor de las 6 de la tarde, al menos cuatro patrullas de la Secretaría de Seguridad Pública con oficiales a bordo comenzaron a seguir y a dispararle a un autobús en el que viajaban normalitas de la Normal de Tiripetío, Michoacán.
Añadió que ante este ataque, alumnos de la Normal Ayotzinapa acudieron en apoyo de sus compañeros hasta el sitio conocido como Los Túneles, donde atravesaron un tráiler, quemaron otro más e hicieron lo mismo con una unidad institucional.
Según Melitón Ortega, estos hechos dejaron un saldo preliminar de dos alumnos heridos y dos más desaparecidos.