• Los integrantes de la Provincia Eclesiástica de Acapulco afirman que “ninguna persona, grupo, institución social o política puede justificar o exigir como derecho o llevar a cabo la muerte de otro ser humano desde su concepción hasta su final natural”

Ana Lilia Torres

Los obispos de las cuatro Diócesis que integran la Provincia Eclesiástica de Acapulco, hicieron un llamado a la ciudadanía a levantar la voz en contra de la iniciativa presentada por diputadas de Morena para que el Congreso del Estado apruebe la despenalización del aborto en Guerrero.

Los representantes de la Iglesia Católica dieron a conocer un posicionamiento después de la celebración del XXX Encuentro Provincial de Pastoral, los días 11, 12 y 13 de enero, en Tlapa, en el que expresaron su rechazo a esa iniciativa presentada por 3 legisladores de Morena.

“Ninguna persona, grupo, institución social o política puede justificar o exigir como derecho o llevar a cabo la muerte de otro ser humano desde su concepción hasta su final natural”, plantearon los representantes católicos.

El texto está firmado por los obispos de Acapulco, Leopoldo González González; de Chilpancingo-Chilapa, Salvador Rangel Mendoza; de Ciudad Altamirano, Joel Ocampo Gorostieta, y de Tlapa, Dagoberto Sosa Arriaga.

“Ante la iniciativa actual que vulnera el derecho a la vida levantamos la voz, no sólo porque somos creyentes, sino porque es un derecho humano fundamental. No olvidemos que el aborto voluntario es un homicidio”, precisan.

Advirtieron que la Iglesia Católica también levanta la voz a favor de todas las mujeres para que tengan acceso a una protección y promoción integral.

En el tema del Covid-19, los obispos expresaron su preocupación por la cuarta ola de contagios en Guerrero y pidieron a la población y a las autoridades, tomar acciones por el bien de todos.

“Nos preocupa la nueva ola de contagios de coronavirus. Somos conscientes de que sólo siendo corresponsables y solidarios con los demás podremos hacer frente a las consecuencias de la pandemia”, señalan.

Los obispos exhortaron “a todos a vacunarse y a acatar las disposiciones sanitarias por seguridad propia, de sus familias y al personal médico a dar lo mejor de sí para salvar las vidas”.

En cuanto al problema de inseguridad, expresaron que hay signos preocupantes de violencia en Guerrero y pidieron a las autoridades y a la población trabajar juntos para erradicarla.

“La solución de esta problemática no es asunto sólo de nuestras autoridades civiles o sólo de la sociedad. Nuestras autoridades civiles no deben sentirse solas ni abandonadas en manos de grupos que dañan a la sociedad”, señalaron en el texto.

Los obispos instaron a las autoridades civiles de todos los niveles, a que trabajen tenazmente a favor de la ciudadanía, desde el inicio de su gestión hasta el final.