• Evelia Catalán, también catedrática de la UAGro, reprochó que el “Código Rojo” en casos de secuestro de personas no sirvió de nada en el caso de su padre, luego de que desapareció el jueves pasado

Josefina Aguilar

“El sistema nos ha fallado”, acusó Evelia Esthela Catalán Casiano, hija del profesor universitario Salvador Catalán Barragán, cuyo cuerpo desmembrado fue encontrado este domingo, y reprochó que el “código rojo” supuestamente implementado por las fuerzas de seguridad para atender casos de secuestros de ciudadanos, “no sirve de nada”.

La mañana de este domingo, familiares del maestro de la Universidad Autónoma de Guerrero (UAGro) que fue reportado como desaparecido desde el pasado jueves, junto con un menor integrante del FUSDEG de nombre Marcos, habían convocado a una conferencia de prensa en la alameda Francisco Granados Maldonado en Chilpancingo, para exigir a las autoridades correspondientes, agilizar su búsqueda y localización.

así como la del menor de 16 años, Marcos,

Sin embargo, esa conferencia se convirtió en un acto de reclamos y exigencias a las autoridades estatales, debido a que poco después de las 9 de la mañana les informaron del hallazgo de restos humanos localizados en bolsas de plástico, en la colonia La Ladrillera, en Tierra Colocara, que correspondían al catedrático y el joven desaparecidos.

Evelia Esthela Catalán informó su familia estaba en Tierra Colorada y le habían confirmado el asesinato de su padre tras identificar los restos.

Denunció que la FGE implementó el llamado “Código Rojo” apenas este sábado, pero solo consistió “en dar vueltas” en Tierra Colorada y un recorrido por carretera, pero no se bajaron a buscar, “y fue todo lo que hicieron”.

Aseguró que en la desaparición de su padre hubo mucha negligencia y burocracia por parte de las autoridades investigadoras.

También reprochó que a pesar de que su padre fue fundador de Morena y apoyó a la ahora gobernadora Evelyn Salgado, no hicieron nada para agilizar su búsqueda y localización.

“Hoy el Estado nos ha fallado, y no nada más a mí, a muchas familias que todavía siguen sus familiares desaparecidos, y desaparecidas, muchas niñas, muchas mujeres, ahora mi padre”, se quejó la también catedrática de la UAGro.

Evelia Catalán lamentó también el asesinato del Marcos Roble Alejo, un joven de 16 años, estudiante del CBTIs número 5, en Tierra Colorada, quien desapareció el mismo día que su padre, cuyo cuerpo fue encontrado en el mismo lugar.

Dijo que definitivamente la FGE debe revisar y mejorar sus mecanismos de búsqueda de personas, debido a que las primeras 24 hora son importantes y si no se hace nada, “ahí están los resultados. Hay gente que lleva meses (desaparecida), años sin saber de sus familiares. Yo al menos tengo un cuerpo a quien llorar”, expresó.

La secretaria de Acción Femenil del Sindicato de Trabajadores Académicos de la Universidad Autónoma de Guerrero (STAUAG), exigió: “lo que quiero es justicia, lo que quiero es que agarren a los responsables y que paguen por este crimen. Por qué los mataron, si no le hacían daño a nadie, lo único que hacían era buscar la seguridad de su propia familia y de la población, eso no es un delito”, aseguró.

Cándido Cruz Vargas, integrante del Comité Ejecutivo del STAUAG, lamentó la falta de interés, tanto del rector de la UAGro, como del Consejo Universitario, para unirse y exigir la presentación con vida del catedrático. Solo se emitió un comunicado muy escueto a través de la dirección de Comunicación Social.

“Lamentablemente los universitarios parece que se han acostumbrado a escuchar estas noticias y no hacer nada, al parecer los universitarios han perdido su espíritu de lucha y está costando las vidas de los trabajadores de universitarios, es necesario retomar la lucha social reorganizarse luchar y pedir justicia”, expuso el también catedrático.