- * El responsable de la Diócesis Chilpancingo-Chilapa dijo que el jerarca de la Iglesia Católica le reveló que ora todos los días para que haya paz en México
Alondra García
El obispo de la Diócesis Chilpancingo-Chilapa, Salvador Rangel Mendoza, afirmó que el Papa Francisco está enterado de la situación de violencia que se vive en Guerrero y reza todos los días para que haya paz en México.
El miércoles 29 de enero, el prelado acudió a la Ciudad de El Vaticano con una comitiva de 23 personas del municipio de Taxco de Alarcón, encabezadas por el alcalde Marcos Efrén Parra Gómez, para entregarle al Papa una réplica de la virgen de Guadalupe fabricada en plata.
En entrevista a su regreso, el obispo explicó que en la audiencia con el Papa Francisco “le dije al Santo Padre que tenemos mucha violencia en Guerrero, muchos asesinatos; el Papa me dijo que conoce la situación y que va a orar todos los días porque haya paz en México”, comentó el obispo.
Se le preguntó si el Papa Francisco sabe de las reuniones que sostiene con jefes del crimen organizado para establecer pactos de paz en Guerrero, Rangel Mendoza dijo que “yo no estoy seguro de si el Papa lo sabe, pero yo no quiero ser ejemplo ni modelo para nadie; ha sido un trabajo muy personal, una responsabilidad pastoral que yo he sentido para mejorar las cosas”.
Hay más de 3 mil desplazados en la Diócesis
El obispo Rangel Mendoza informó que desde su llegada a Guerrero, hace cinco años, se ha registrado el desplazamiento forzado de por lo menos tres mil personas de 12 comunidades pertenecientes a la Diócesis Chilpancingo-Chilapa.
El ejemplo más claro, dijo, es lo ocurrido en las comunidades de la sierra de Leonardo Bravo, donde se registró el desplazamiento de unas dos mil personas durante noviembre de 2018.
Señaló que varias familias se fueron del estado, pero otras permanecen en Chichihualco y están a la espera de que haya condiciones de seguridad para regresar a sus pueblos.
Rangel Mendoza criticó que, a más de un año del desplazamiento forzado masivo de pueblos de la sierra, las autoridades no hayan replegado al grupo criminal que ocupó las comunidades.
“Yo veo complacencia y hasta complicidad de la autoridad”, reprochó.
El obispo indicó que “hay cuatro puestos de control” del grupo criminal que tiene control en la ruta de los pueblos de la sierra y criticó que el gobierno federal les permita operar con tal impunidad.