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  •  El secretario técnico de la Mesa para la Construcción de la Paz en Guerrero consideró que esos grupos no deben portar armas de uso exclusivo del Ejército y se les debe limitar su presencia en los pueblos originarios 

Redacción 

Si se descuida la regulación de las policías comunitarias en Guerrero,“el problema se puede extender aún más, porque son grupos que tienden a jugar ciertos ámbitos de poder y pueden retar al Estado”, advirtió el secretario técnico de la Mesa de Coordinación para la Construcción de la Paz, Hermes Teodoro González, quien defendió la estrategia del gobierno federal de no enfrentar a los delincuentes para construir la paz en el país.

Al responder cuestionamientos de los miembros del Grupo Aca, el funcionario aceptó además que la delincuencia organizada ha crecido tanto en Guerrero que “tiene en jaque al Estado”.

De acuerdo con información publicada por Quadratín Guerrero, Teodoro González dijo que la regulación de los 12 grupos de policías comunitarias que operan en el estado, se debe realizar con respeto al derecho de los pueblos originarios a su autodeterminación, pero bajo la supremacía del Estado, porque si se pierde soberanía, se pierde el control del desarrollo de la sociedad.

De entrada, consideró que se les debe prohibir la portación de armas de uso exclusivo del Ejército, limitar la presencia en los pueblos originarios, que sus integrantes sean elegidos por sus propias comunidades, que éstas no salgan de las áreas donde son elegidas y nombradas, y que sean órganos auxiliares de la seguridad, pero no impartan justicia.

Advirtió que el origen de la violencia en Guerrero tiene diferentes aristas que atribuyó al histórico abandono heredado al actual gobierno, por lo que “se debe actuar con mucha inteligencia y medir las realidades”.

Defendió la estrategia para construir la paz promovida desde el gobierno federal y que se ha replicado en las entidades y municipios gobernados por Morena.

“Tenemos que empezar a generar una cultura que nos reencuentre con los valores, que nos reencuentre con un nuevo humanismo para reconstruir la paz, (porque) no es como se cita coloquialmente, la confrontación entre el Estado y el delincuente, porque los muertos al final son jóvenes que detrás de ellos hay desempleo, pobreza, marginación y todo ese conglomerado de cuestiones negativas”, argumentó Teodoro González.

Sobre los bloqueos que realizaron comerciantes y transportistas en Acapulco el viernes pasado, que habrían sido una respuesta de la policía comunitaria de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero tras la detención de dos presuntos integrantes de un grupo delictivo en San Marcos, justificó la inacción de las autoridades ya que por encima del derecho humano individual, está el derecho humano colectivo, el derecho a la paz.