- * Javier Rojas, titular de esa dependencia, dijo que trabajan para cambiar la mentalidad de pueblos indígenas sobre ese problema, pero aceptó que forma parte de sus usos y costumbres
El titular de la Secretaría de Asuntos Indígenas y Afromexicanos, Javier Rojas Benito, informó que la dependencia estableció acciones encaminadas a erradicar el matrimonio infantil en las comunidades indígenas de Guerrero.
En entrevista, reconoció que no ha sido fácil cambiar la mentalidad de los pueblos indígenas, sobre todo porque se rigen por usos y costumbres.
El funcionario estatal señaló que para ellos “es tradición” que las mujeres en una edad muy temprana contraigan matrimonio “arreglado” y reconoció que “será difícil de erradicarlo”.
Sin embargo, Rojas Benito confió en que paulatinamente desaparecerá esta costumbre de algunos pueblos originarios.
Por ello, indicó que la Secretaría de Asuntos Indígenas y Afromexicanos ha establecido convenios con autoridades comunales de varios municipios, principalmente de la región Montaña.
A través de esos convenios, se han realizado talleres de concientización, para que las nuevas generaciones dejen de lado tradiciones como el matrimonio infantil.
“Nos
da gusto encontrar en Cochoapa jovencitas que están por concluir su bachillerato,
esa ya es ganancia, es un gran logro del estado porque es muy complicado cortar
de tajo patrones de conducta ya muy arraigados, sin embargo, se tiene que hacer
el trabajo de concientización”, comentó.
En otro tema, destacó que a pesar de la constante migración “no hay comunidades
fantasmas” en las zonas indígenas.
Rojas Benito explicó que sí existe un fenómeno migratorio muy marcado, que implica el desplazamiento de familias enteras para trabajar en otros municipios e incluso en otras entidades.
Pero aclaró que a pesar de este fenómeno no existen pueblos completamente abandonados.
Reconoció que el extinto programa Prospera “los arraigaba más” a sus comunidades.
Desde la desaparición de ese programa, dijo “ahora sí se va toda la familia a trabajar a otros estados, lo que incrementa el número de migrantes quedando solamente ancianos en las comunidades”.