KARMELYNDA VALVERDE
El senador coloshito y sus exabruptos
Muy chucho cuerero —según él— se quiso ver el senador Armando Ríos Piter, dándole carilla al gobernador Héctor Astudillo Flores, y le salió vana la nuez. Mucho me temo que al perfumado ex alumno de don Florencio Salazar Adame, y ñizo del exgobernador de mi pozolero estado, Zeferino Torreblanca, le anden haciendo tierra los cables, pues como que todavía no entra a la dinámica andropáusica como para estar tendiendo problemas con el alemán Alz.
Aunque la neta, la neta, es que el de los coloshitos en la cabeza, no ha sabido ser ñizo ¡de nadie! Se le da el oportunismo a todas margaritas. Sabe dar atolito con el dedo y maneja como pocos el doble discurso. Incluso, es experto en aprovechar las ocasiones políticas que se le presentan o que arrebata al grito de “matanga dijo la changa”. Pero si es algo olvidadizo, por lo que le urge una mega dosis de Sukrol que le ayuden a refrescar la memoria.
Hay quien jura ante un altar que sus señalamientos fuera de lugar en contra del gober Astudillo Flores, vía twitter, tuvieron un patrocinador. Pero a mi neta que se me hace y se me “afigura” que el auto llamado “jaguar” se ha dado color de que sus bonos han bajado tremendamente, que creyó que tirándole caquita al Number One de mí también chilenero estado, iba a levantar su rating y “oh pellzcashion” se le reviró feo.
Le recordaron en las redes (que fue donde él mismito comenzó el borlote) todas sus trapacerías politicoides, que incluyen deslealtades partidarias, sus volteadas de cachucha y hasta le obsequiaron un titipuchal de mentaditas (de esas que no son de menta) para ayudarle a refrescar la memoria.
¡Uf! neta de pena ajena. El otrora “jaguar” ya ni a micifuz llega, políticamente hablando. Sin duda que viendo su triste panorama politicoide, pensó en matar vívora en viernes santo, pero lástima que todavía le cuelga pa’la cuaresma. Lo que si puede hacer, es disfrazarse a final de mes aunque sea de Toño, el tigre que es imagen de la Zucaritas. Digo, si es que sigue aferrado en su espíritu gatopardo y en sacar las garras.
Menos mal que después de la acomodada que le dieron, se quedó chitón perico e “ipsofactamente” subió a tribuna para exigir que no se recorte el presupuesto a mi pozolero y chilenero estado de Guerrero.
Dicho sea en otras palabras “machete tate en tu vaina”.