* Cada año alrededor de 20 mil niños y niñas son víctimas de trata por redes de prostitución, de acuerdo al Departamento de Estado de EEUU

 

MÉXICO, DF.— El turismo sexual en México “es un cáncer silencioso” que en los últimos 15 años ha colocado al país dentro de los cinco primeros lugares a nivel mundial en esta práctica ilegal.

Un informe reciente del Departamento de Estado de Estados Unidos, en poder de la diputación federal del PRI, Julieta Fernández Márquez, señala que cada año alrededor de 20 mil niños y niñas son víctimas de trata por redes de prostitución.

Añade el documento que el delito va en aumento principalmente en zonas como Acapulco, Guerrero; Cancún, Quintana Roo, Tijuana, Baja California, y Ciudad Juárez, Chihuahua.

Por su parte, la Organización de las Naciones Unidas (ONU), en su compilación de informes 2004-2010, apunta “la falta de estadísticas y datos confiables sobre el alcance de la explotación comercial infantil en México, en donde incluso no se ha llevado a cabo ningún estudio de manera oficial por las instituciones o dependencias de la prevención del delito o de procuración de justicia”.

El Departamento de Estado norteamericano, por su parte, detalla que los niños y niñas víctimas de ese delito “son engañados con falsas ofertas de empleo para trasladarlos de las zonas rurales pobres a las urbanas, a las fronteras y a las zonas turísticas donde ha crecido el turismo sexual infantil”.

Esta indiferencia de la sociedad y de las autoridades mexicanas “se convierte en complacencia, en silencio aberrante, al no hacer nada por evitarlo, por prevenirlo, por proteger los derechos fundamentales de los niños y niñas mexicanos”, argumentó la diputada guerrerenses Fernández Márquez.

Ante esta realidad, la legisladora tricolor presentó esta semana ante el pleno un punto de acuerdo, al que se sumaron diputados de casi todas las bancadas, a fin de que los Congresos locales legislen en la materia en los estados de la Federación en donde no esté tipificado el delito de turismo sexual.

El texto señala que se impondrá pena de 7 a 14 años de prisión a quien promueva, publicite, invite, facilite o gestione por cualquier medio a una o más personas viajen al interior o exterior del estado con la finalidad de que realice cualquier tipo de actos sexuales o simulados con una o varias personas menores de edad o que no tienen capacidad para comprender el significado del hecho o no se puedan resistir a éste. (Agencias)