Alejandro Mendoza

 

Por la repercusión político-electoral en Guerrero que pudiera tener un posible rompimiento político entre Ricardo Monreal y Andrés Manuel López Obrador, es necesario comentar algunos puntos de vista que pueden permitir no cantar victoria en quienes quisieran ver concretado tal suceso, aunque tampoco puede ser descartable.

Más allá de pifias y fobias, lo cierto es que Monreal tiene más de 20 años de aliado político de AMLO. Se la ha jugado con él. Hace apenas cinco meses, Monreal afirmó que antes que todo está el proyecto de Nación, el hecho de que AMLO sea presidente de México. Se dijo entonces estar dispuesto a ceder la Ciudad de México en ese objetivo.

Al menos 17 de 20 encuestas lo ubicaban arriba en las preferencias electorales rumbo a la elección del jefe de Gobierno de la CDMX. Sin embargo, la encuesta de Morena para definir a su candidato a jefe de Gobierno lo ubicó en tercer lugar. Monreal, Batres, Claudia Sheinbaum y Mario Delgado participaron en la encuesta.

Y ante la polémica de este asunto, Morena tuvo que exponer la metodología de los resultados de la encuesta que dio la delantera a Claudia, luego a Batres, Monreal y Mario.

A partir de este hecho, se especula si Monreal, quien pidió rectificar esos resultados fundamentado su exigencia en la máxima de AMLO, “no mentir, no robar, ni traicionar al pueblo de México”, se quedará en Morena o será candidato por otro partido político, incluido el FAD que propone el PRD.

Monreal es un experimentado político que sabe el terreno que pisa. Por eso hay quienes alientan la especulación sobre su futuro político. Hay quienes aprovechan esta discrepancia al interior de Morena para lanzar sus críticas, fundadas o no, contra AMLO.

El propio Monreal delineó que tiene trayectoria política, presencia pública y capital político propio, es decir, no se cuelga de la figura de AMLO para sobresalir.

José Ureña explicó que AMLO habría vetado a Monreal por estos motivos:

1.- En 2016 había retrasos en la entrega de recursos a las delegaciones gobernadas por Morena y Ricardo Monreal buscó al secretario de Hacienda y Crédito Público, José Antonio Meade. Obtuvo el dinero, pero esta gestión fue criticada por Claudia Sheinbam por instrucción superior.

2.- A fines de 2016 se discutía en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) el presupuesto para la Ciudad de México con abierta oposición de los diputados de Morena. Seis de ellos, identificados con Monreal, se abstuvieron y eso enfureció a López. Su instrucción era dejar sin dinero al Gobierno de Miguel Mancera y a la Ciudad de México para incrementar el odio hacia el Partido de la Revolución Democrática (PRD) y ofrecerse como redentor.

3.- Después vino la impugnación de Morena al presupuesto capitalino, frente al cual El Peje sumó a la panista Xóchitl Gálvez pero excluyó a su delegado en Cuauhtémoc: Monreal.

4.- Cuando se integraba la bancada morena para la Asamblea Constituyente, Monreal propuso a dos personas de su confianza y con capacidad oratoria y parlamentaria para el caso. Pero por tache directo de López quedaron fuera Alejandro Rojas Díaz-Durán y José Francisco Ortiz Pinxchetti.

5.- En algún momento, con evidente propósito futuro, Ricardo Monreal empezó a integrar la Red de Amigos de Monreal. El reproche vino desde el propio partido: la Comisión de Honestidad y Justicia fustigó esos esfuerzos personales y ordenó al propio Monreal y a los demás delegados y aspirantes a cargos de elección no seguir ese ejemplo.

Son muchos y muchas los que están a la expectativa del desenlace final de este capítulo político. Por lo mientras Monreal rechazó la candidatura a la Senaduría que le propusieron consejeros de Morena. El riesgo al parecer es latente de un rompimiento político, pero al final de cuentas, puede resultar que todo fue parte de una estrategia política y Morena solidifica su fortalecimiento en la CDMX. Al tiempo.

Los errores fueron míos, los aciertos de Dios, sonría, sonría y sea feliz

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