Juan Blanco 

Maestros de la Coordinadora Estatal de los Trabajadores de la Educación en Guerrero (CETEG), de las regiones Acapulco, Costa Grande y Norte, acudieron a las oficinas del Poder Ejecutivo para exigir al gobierno estatal el cumplimiento a sus demandas laborales.

Alrededor de la 1:00 de la tarde, unos 80 profesores llegaron a las escalinatas del inmueble que se ubica sobre el encauzamiento del Río Huacapa y frente al Auditorio “Sentimientos de la Nación”, para sostener una reunión que ya tenían agendada con el secretario de Educación Guerrero, Marcial Rodríguez Saldaña.

Previo a su ingreso, los líderes de la organización magisterial en la región Acapulco, Walter Manuel Añorve Rodríguez, y en la Costa Grande, Manuel Salvador Rosas Zúñiga, ofrecieron declaraciones a los medios de comunicación, donde dijeron que aún hay pendientes en materia laboral que no se han atendido, como es el caso del pago de sueldos a maestros que cubrieron interinatos desde septiembre del 2021.

Agregaron que también hay al menos mil maestros en todo el estado a los que no se les prorrogó su contrato en agosto de este año, pero que a pesar de ello siguen estando frente a grupo, es decir, impartiendo clases a los estudiantes, sin recibir ningún sólo peso.

Reprocharon que el gobierno estatal y federal no hagan nada para avanzar con el proceso del estímulo a la jubilación con el propósito de liberar plazas, y así otorgárselas justamente a éstos profesores que están en la incertidumbre laboral.

En materia educativa, señalaron que tampoco hay avances en cuanto al mejoramiento de infraestructura de 50 escuelas del nivel básico que “más lo necesitan”, ni en cuanto a la incorporación de otros planteles al programa federal “La Escuela es Nuestra”.

Los dirigentes anunciaron que de no haber respuesta positiva a sus peticiones en la reunión que sostendrían con Rodríguez Saldaña, seguirían con sus movilizaciones, y que muestra de ello es que tomaron las instalaciones del Ex-Ineban y el edificio Oviedo, en Acapulco, y oficinas recaudadoras en Atoyac y Zihuatanejo, en la Costa Grande. 

A su vez, un grupo de profesores encapuchados de la CETEG retuvieron autobuses donde pidieron a los ciudadanos descendieran de los vehículos y después ser abordados por ellos, sin dar a conocer la utilidad de los vehículos tomados. (API)