• El fin de semana, inspectores de Profeco verificaron que en esas estaciones de servicio no vendían litros de gasolina completos a los consumidores 

Juan Blanco

Inspectores de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) inmovilizaron al menos seis bombas despachadoras de combustible en dos de las 16 gasolineras que hay en Chilpancingo, porque no vendían litros completos de combustible a los usuarios.

Se trata de las estaciones Carreto, subsidiarias de Pemex, que se encuentran sobre la avenida Lázaro Cárdenas a un costado del Club de Leones, frente a Ciudad Universitaria Sur de la Universidad Autónoma de Guerrero, y en la lateral norte-sur de la Autopista del Sol.

En la verificación que se hizo en ambas estaciones de servicio con instrumentos especiales de medición, el personal de la Profeco encontró que a los consumidores les vendían entre 700 y 800 mililitros de gasolina y no litros completos, como habían denunciado grupos de transportistas.

“Cada una fueron diferentes cantidades, siempre de menos de lo que les dan de tolerancia, y dos (mangueras) se comprobó que fueron alteradas antes de la verificación de Profeco Federal”, denunció el dirigente de la Asociación Civil ‘Grupo Chilpo’, Adrián Alarcón Ríos, quien se sumó a las protestas por el aumento de precios en los combustibles.

En el trascurso de este domingo se prevé que inspectores de la Profeco continuaran la verificación en el resto de las gasolineras de la capital, las cuales, además de comercializar litros incompletos, fueron señaladas el lunes pasado por tener los precios más altos en todo el país.

Lo anterior generó descontento y movilizaciones por parte de empresarios, transportistas del servicio público local y foráneo, además de conductores de carros recolectores de basura privados.