- “El Poder Legislativo tiene que llamar a cuentas al Poder Judicial” por la desaparición de videos del Palacio de Justicia de Iguala que registraron el secuestro de entre 14 y 17 normalistas, asegura el abogado de Tlachinollan
Jesús Saavedra
El abogado de los padres de los 43 estudiantes desaparecidos en Iguala, Vidulfo Rosales Sierra, aseguró que en Guerrero las autoridades locales “se lavan las manos” y dicen que no tienen nada qué hacer en este caso, pero reprochó que “el Poder Judicial desapareció los videos (del Palacio de Justicia de Iguala)” y “el Poder Legislativo tiene que llamar a cuentas al Poder Judicial”.
¿Cómo que no tienen nada qué hacer? El gobernador tiene que hacer los exhortos necesarios para que el Poder Judicial sea investigado”, afirmó.
Este martes, los padres de los 43 estudiantes desaparecidos en Iguala, con el respaldo de unos 500 integrantes de la Federación de Estudiantes Campesinos Socialistas Unidos de (Fecsum), se manifestaron afuera del Congreso del Estado, antes de que los normalistas causaran severos daños al inmueble legislativo.
En su intervención, Rosales Sierra dijo que la presencia en el Congreso del Estado era para exigir a la Comisión que los propios diputados formaron para este caso, que “profundice la investigación relacionada con la pérdida de los videos que se grabaron en Palacio de Justicia en Iguala”, los cuales habrían documentado la desaparición de un grupo de entre 14 y 17 estudiantes la noche del 26 de septiembre del 2014.
El activista de Tlachinollan explicó que de acuerdo con las declaraciones de los técnicos del sistema de circuito cerrado de Palacio de Justicia en Iguala, “que trataron respaldar los videos, el dispositivo donde guardaron estaba descompuesto, estaba averiado”.
Señaló que los peritajes que se hicieron de parte de la Fiscalía General de la República (FGR) al sistema de circuito cerrado de las cámaras de vigilancia de ese inmueble en Iguala, “nos indican que previamente hubo dos intentos de extraer información, hay evidencia que dos veces ingresaron al sistema para extraer información, de igual forma este sistema de circuito cerrado tiene una modalidad y un mecanismo para controlarlo vía remota, de igual forma en octubre del 2016 hubo 4 ingresos vía remota para extraer información”.
Rosales Sierra aseguró que es “evidente que el Poder Judicial se confabuló con la empresa y altos funcionarios para extraer previamente esa información y cuando los técnicos quisieron respaldar la información, ésta ya no se encontraba en el sistema de circuito cerrado”.
Dijo que “queremos que el presidente del TSJ, Alberto Neri Celis, como presidente del Poder Judicial venga al Congreso a explicar ante el pueblo, ante el pleno, ante los medios, que explique qué pasó con esos videos, dónde están”.
Consideró que el magistrado también debe explicar si ya inició un procedimiento “contra esos funcionarios que incurrieron en irregularidades, si hay un procedimiento penal o de otra índole contra la entonces presidenta del TSJ, Lambertina Galeana Marín, de quien sabemos hasta una de sus hijas trabaja en el TSJ”.
Vidulfo Rosales insistió que los padres exigen “que la Comisión de Ayotzinapa del Congreso la cite a comparecer; ya tiene más de un año que se formó esa Comisión y no sabemos los frutos que haya rendido, los trabajos y avances que tenga al respecto, por eso estamos aquí protestando y seguiremos protestando”, advirtió.
Se quejó que en Guerrero “todas las autoridades se lavan las manos y que no tienen nada que hacer en el caso; el gobernador, el Poder Legislativo, dicen nosotros no tenemos nada que ver y allá que lo investigue Andrés Manuel López Obrador, allá que el gobierno federal vea y se lavan las manos, como si en Guerrero no hubiera ocurrido la desaparición de los 43 estudiantes”.
Subrayó que “aquí en Guerrero el Poder Judicial desapareció los videos” y debe haber una investigación por su desaparición.
El activista admitió que “se nos cuestiona nuestra protesta (por la violencia que ejercen) y nuestro posicionamiento, pero somos claros: estamos exigiendo que rinda cuentas el presidente del TSJ y que el Congreso, que los diputados que no hacen nada y se la pasan de puente en puente, haciendo vacíos y vacíos en Guerrero”, hagan algo al respecto.
Reprochó que “tenemos un Congreso incompetente, un Congreso inmóvil, un Congreso cómplice de los otros poderes y que no tiene la capacidad de llamar a cuentas a los otros poderes y que se desdice del tema de la desaparición de los 43 estudiantes”.
En el mitin intervino don Alfredo Galindes, padre de uno de los 43 estudiantes desaparecidos, quien dijo que siguen “en pie de lucha exigiendo el esclarecimiento de los hechos de nuestros hijos (sic), ya tenemos seis años y las autoridades no nos dan una respuesta”.
Añadió que “venimos al Congreso a exigir que hagan su trabajo y que den resultados para que haya respuestas a la desaparición de nuestros hijos, es injusto lo que hicieron con ellos, esperemos que los normalistas nos sigan acompañado en esta lucha que será larga y no vamos a descansar hasta encontrarlos”.
Doña Metodia Carrillo, madre de otro estudiante desaparecido, señaló que la manifestación en el Congreso era para exigirle a los diputados que cumplan con su labor en la Comisión Especial que conformaron el año pasado y que debería citar a comparecer al presidente del TSJ para que de un informe público de lo que sucedió con las videograbaciones de Palacio de Justicia en Iguala, que aseguran documentaron la desaparición de un grupo de 14 a 17 normalistas en ese bulevar de acceso a esa ciudad.
A nombre de la Normal Rural de Ayotzinapa, un integrante del Comité Estudiantil aseveró que respaldarán la lucha de los padres de los 43 normalistas desaparecidos, porque “queremos justicia, queremos la verdad, que haya paz en Guerrero donde sigue habiendo violencia, pobreza y desigualdad social”.
Con este mitin los padres de los 43 concluyeron sus actividades en Guerrero y a partir de este miércoles al sábado realizarán sus protestas en la Ciudad de México, para regresar a Iguala el domingo, donde realizarán un mitin en las dos estelas que han construido para recordar a tres normalistas asesinados la noche del 26 y madrugada del 27 de septiembre del 2014.