Alondra García

El titular de la Secretaría de Educación Guerrero (SEG), Arturo Salgado Uriostegui, evidenció que en alguna comunidad de indígena de Chilapa los padres de familia impiden que sus hijos vayan a la escuela, a pesar de que sí cuentan con maestros.

Por lo anterior, el funcionario estatal pidió a los padres de familia de comunidades como Alcozacán que permitan que sus hijos vayan a los centros educativos.

Dijo que en esa comunidad la SEG tiene servicio de educación primaria y los niños son atendidos por un maestro.
Sin embargo, reconoció que la comunidad no cuenta con escuela telesecundaria y por ello, los menores tienen que acudir a otra comunidad.

Por ello, dijo que hablarán con los padres de familia para conocer si debido a las condiciones de violencia no pueden salir del pueblo.

En recientes entrevistas, habitantes de Alcozacán denunciaron que algunos menores tienen que acudir a otra comunidad atravesando una zona donde hay conflictos entre localidades y eso los expone.

Al respecto, el funcionario estatal dijo que la SEG realizará un estudio para conocer cuánto alumno de nivel secundaria hay en Alcozacán, para enviarles un maestro.

Agregó que la SEP pone como requisito que debe haber 20 alumnos como mínimo para aperturar una telesecundaria, de lo contrario tendrían que ser atendidos por maestros de CONAFE, otra opción que consideró efectiva para dar mayor seguridad a los estudiantes.

En el caso de la Tierra Caliente, en donde al menos 40 comunidades han sido desplazadas por la violencia, dijo que se han atendido a todas las poblaciones en esa situación.

“Los maestros tienen que acudir a sus comunidades y cuando se encuentran una situación de un enfrentamiento se retiran por algún momento, pero vuelven a regresar”, por eso es que aseguró en Tierra Caliente todas las escuelas están trabajando de manera normal.