* Pedían la destitución del titular, Gilberto Solano y una decena de sus allegados

 

Jesús Saavedra

 

Luego de dos semanas en paro laboral, este jueves trabajadores sindicalizados de la Secretaría de Asuntos Indígenas y Campesinos (SAI), desistieron de su movimiento y entregaron sus oficinas para reanudar sus tareas, dejando atrás su principal petición que era la destitución del titular y de una decena de funcionarios.

Desde el pasado 2 de febrero, trabajadores sindicalizados de esa dependencia iniciaron un paro y la ‘toma’ del inmueble en demanda de la destitución del titular de la dependencia, Gilberto Solano Arriaga y una decena de funcionarios de primer nivel a quienes acusan de “falta de compromiso, discriminación laboral y utilizar recursos públicos para promoción política personal”.

Habían pedido la intervención directa del gobernador en el conflicto, de quien pidieron una audiencia y los reciba para explicarle su pliego de peticiones.

Denunciaron que decidieron iniciar este paro de labores ante el “desinterés” del secretario, Gilberto Solano por dialogar con ellos, porque desde el año pasado le pidieron una docena de veces una mesa de diálogo y no los ha recibido.

Explicaron que principalmente le querían plantear el tema del presupuesto que en el 2015 fue de 25 millones de pesos; el año pasado de 17 millones de pesos y para este año de 10 millones, para el cual desaparecieron los programas de difusión de la cultura y de proyectos productivos.

Afirmaron que el paro de labores y la toma de las oficinas era por su principal demanda es la destitución de Gilberto Solano y de su equipo de trabajo; Javier Rojas Benito, Felipe Sánchez Ramírez, Arquímedes Gil Nabor Ibáñez, José Antonio Tascon Mendoza, Anayeli Rebaja Pedro, Jaime Pineda, Benigno Gallardo de la Rosa, Vicente López Carrasco, Guadalupe Bobadilla y Omar Torrijos Posada Wong.

Este jueves, representantes de la dirección de Personal y de la sección séptima del SUSPEG, recorrieron las instalaciones de esa dependencia, acompañados de Gilberto Solano a quien entregaron las oficinas y dio a conocer que se van a instalar mesas de negociación para atender sus peticiones y atribuyó a este conflicto “en una falta de comunicación”.

Añadió que los trabajadores se desistieron de pedir su remoción y la de sus principales colaboradores, “porque entendieron que es facultad del gobernador, vamos a mejorar la comunicación y las actividades en la dependencia”, añadió.