* También instalaron un retén en la Autopista del Sol para pedir cooperación a los automovilistas que transitaban por esa vía
SALVADOR BELLO
Con el pretexto de que el próximo 26 de enero se cumplirán 16 meses de lo ocurrido en Iguala, alrededor de 80 estudiantes de la Normal Rural de Ayotzinapa “Raúl Isidro Burgos” robaron un par de autobuses de pasajeros al norte de la ciudad, para lo cual obligaron a bajar a sus ocupantes.
Esta acción forma parte de los preparativos para las actividades que en compañía de padres de familia de los 43 jóvenes desaparecidos y activistas que los respaldan, realizarán el próximo martes.
Las actividades de nos estudiantes comenzaron minutos antes de las 14:00 horas, cuando el contingente de normalistas arribó de la carretera estatal de cuota Chilpancingo-Tixtla, mejor conocida como nuevo libramiento a Tixtla, a bordo de un autobús Estrella de Oro con número económico 1536 y 2 camionetas llenas de estudiantes.
Los jóvenes de inmediato colocaron un retén sobre la Autopista del Sol, abajo del puente del punto conocido como Tierras Prietas, donde comenzaron a pedir cooperación voluntaria a los automovilistas, además de repartir volantes en los que explicaban los motivos de sus acciones.
Como suele ocurrir, además de recabar el dinero, los jóvenes detuvieron varios autobuses de pasajeros y obligaron a bajar a los ocupantes, sin importarles las molestias que ocasionan.
Para las 14:30 horas, arribó al sitio un numeroso contingente de Policías Antimotines Estatales, pero los normalistas ya habían robado tres autobuses más: uno de la empresa “Futura”, uno de “Costa Line” y un “Estrella de Oro”, con los números económicos 2735, 2028 y 8412, respectivamente.
Ante la presencia policíaca, los estudiantes abordaron los autobuses y se dirigieron a su institución educativa, pero abandonaron el autobús de la línea Estrella de Oro con número económico 8412, sobre el citado libramiento sin revelar el motivo.
Las otras dos unidades sí quedaron en manos de los jóvenes, quienes desde que comenzaron sus protestas, hace ya 16 meses, han robado cientos de unidades, entre autobuses de pasajeros, camionetas repartidoras de diversos productos y vehículos propiedad de diversas dependencias de gobierno.
Muchos de esos vehículos han sido destruidos e incendiados durante sus violentas manifestaciones, mientras que otros han sido desmantelados en los terrenos de su escuela, donde desde el aire puede apreciarse un gran deshuesadero.