Marciano Salinas 

 

El Club América estaba en marcha, con ideales de competencia y de amor al futbol. A Garza Gutiérrez, apodado “Récord”,  y al grupo de jugadores que le acompañó en la aventura les costó trabajo entrar en un mundo que se mostraba celoso de tener nuevos integrantes. Al poco tiempo de su formación, el nuevo club de Santa María la Ribera competía ante consolidados como el Real España o el Asturias, solamente para ser comparsa de éstos, pero el tiempo no tardaría en otorgar la importancia a este conjunto que hoy cumple 99 años.

Uno de los más grandes equipos en la historia del país y quizás del continente, que inspiró su nombre, empezaba su camino. Amado y odiado, jamás desapercibido, el América se ostenta en un selecto grupo que puede presumir títulos, afición en cualquier rincón de México y una grandeza que no se adquiere de la noche a la mañana.

De los Estudiantes a los Millonetas, pasando por los Canarios y los Azulcrema, y hasta llegar a su actual mote, las Águilas. El América ha tenido una metamorfosis a lo largo de su historia, aunque el sentido del club ha sido el mismo (a pesar, incluso, de la modificación por una época de su nombre y su histórico emblema).

Grandeza entre grandes. El América adquirió popularidad gracias a las grandes rivalidades que protagonizó con distintos equipos a lo largo de las décadas. No solamente con los ya mencionados Real España, Asturias, Atlante y Necaxa, sino también con otros clubes que tienen historia de suma relevancia dentro del futbol mexicano como el Deportivo Cruz Azul, el Club Universidad y, por supuesto, el Club Guadalajara, con el que protagoniza el Clásico más importante de México.

Con el auge de Chivas en la década de los 60’s, Emilio Azcárraga se encargaría de depositar en su nuevo equipo todo el antagonismo necesario para hacerle frente al “Campeonísimo” de la época. El Clásico se gestó a partir de esta tendencia, que se reforzó con una reñida competencia en las canchas cada vez que azulcremas y rojiblancos se medían en el césped, lo que representaba también una disputa poco convencional entre las dos ciudades más importantes del país.

Pero el América también tendría su afrenta territorial con sus dos vecinos “incómodos”. El Distrito Federal era demasiado chico para América, Pumas y Cruz Azul, a la misma usanza que los duelos del viejo oeste. El conjunto de Coapa gestaría una profunda rivalidad con los Cementeros después de una Final que todavía es llorada por los americanistas que presenciaron cómo su equipo era acribillado 4-1 ante La Máquina de Miguel Marín y al mando del legendario Raúl Cárdenas, en 1972.

Polémicas arbitrales, arcas con oro casi infinito, contratos millonarios, actitud soberbia para muchos, ganadora para otros;  América es un protagonista indiscutible del futbol mexicano.

Un total de 16 títulos de Liga, 12 de ellos logrados en la época profesional, 6 Copas, 5 veces Campeón de Campeones, 6 títulos en Copa de Campeones de Concacaf, además de ser el primer club mexicano en levantar la Copa Interamericana (1978 y la de 1991). América tiene un legado importante en el balompié, no solamente por sus títulos, sino por el modo de comprender el futbol.

Las Águilas buscan continuar su vuelo. Su historia lo respalda, ésa que difícilmente será borrada. Amado y odiado, lo cierto es que el futbol mexicano no podría entenderse sin este conjunto, que tuvo un inicio modesto hace 99 años, en el humilde número 136 de José Alzate.