Familiares, amigos y ciudadanos de Chilpancingo despiden entre lágrimas, porras y consignas al presidente municipal de Chilpancingo, Alejandro Arcos Catalán, asesinado la tarde de ayer en esta ciudad capital.
Minutos después de las 2:00 de la tarde salió el cortejo fúnebre de la iglesia del barrio de Santa Cruz, con dirección a la Catedral de Santa María de la Asunción, en dónde se realizaría su última misa de cuerpo presente.
Durante el recorrido decenas de familiares, amigos y ciudadanos se posicionaron de tras de la carroza fúnebre en dónde llevaban el féretro del edil capitalino.
El cortejo tránsito por la avenida Juárez en dónde decenas de capitalinos se acercaron para despedir a Arcos Catalán, asimismo una danza de Tlacololeros se integro al contingente y trabajadores del centro de salud de la alameda, las oficinas centrales del sindicato de salud y edificio Vicente Guerrero, salieron para despedir con aplausos y lanzaras pétalos de rosas a la carroza.
Al llegar a la calle Madero la carroza, el cortejo ingreso al zócalo capitalino, por la entrada del casino del estudiante, en dónde los chilpancingueños ya lo esperaban con un gran túnel de aplausos.
Al llegar a la catedral, los párrocos ya lo esperaban para bendecir el féretro y entre lágrimas y gritos de justicia el presidente municipal ingreso al templo.
Al culminar la eucaristía, Alejandro Arcos Catalán, fue trasladado al Ayuntamiento capitalino para ser despedido por los ciudadanos y trabajadores, quienes hicieron una falla por dónde paso el féretro hasta llegar a la entrada del palacio municipal.
Fue así como entre aplausos, llantos y gritos de justicia, fue despedido el edil capitalino, para posteriormente ingresar a la carroza funebre y ser traslada al lugar donde será cremado y después entregado a sus familiares.