ACAPULCO. —Mónica Estrada Neiszen, secretaria nacional de la Asociación Mexicana de Agentes de Seguros y Fianza (Amasfac), informó que el huracán Otis se posiciona como el tercer fenómeno natural más catastrófico para el sector asegurador, tras la pandemia de Covid-19 y el huracán Vilma, que ostentan los mayores costos en la historia del país.

Carlos Peña, presidente del Comité de Daños de Amasfac, subrayó que las evaluaciones continúan, ya que aún queda por indemnizar a más afectados. No descartó la posibilidad de que Otis, que devastó Acapulco y Coyuca de Benítez, pueda ascender al segundo lugar entre los desastres más devastadores en México.

“Hasta la fecha, se han desembolsado más de dos mil millones de dólares, equivalente a más de 73 mil millones de pesos por parte de las compañías aseguradoras en todos los sectores: vehículos, hogares, negocios, y aún hay siniestros pendientes de pago al 27 de marzo”, detalló Peña.

Añadió que el 61% de los pagos realizados en Acapulco corresponden a pólizas de seguros de daños, mientras que el 39% se destina al ramo automotriz.

“La penetración del seguro en Acapulco es muy baja. Si el 30% de la población hubiera estado asegurada, habrían superado las cifras de la pandemia”, señaló Peña.

Respecto al seguro de hogar, Peña mencionó que se han logrado indemnizaciones debido a seguros de daños impuestos por asociaciones de crédito de viviendas de interés social, no necesariamente porque los propietarios busquen protección contra fenómenos hidrometeorológicos.

Alfredo Chung, director del distrito Metropolitano de Amasfac, agregó que el sector asegurador ha recibido 104 reclamaciones de hoteles, 20 mil en viviendas, 212 en embarcaciones y sector marítimo, además de cuatro mil en otros rubros y más de 15 mil en automóviles.

“El sector asegurador ha agilizado los pagos al sector hotelero, en línea con el compromiso de AMIS (Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros) y Amasfac. Es crucial contar con un seguro adecuado, no solo para terremotos, sino también para fenómenos hidrometeorológicos como el huracán Otis. De más de 40 mil reclamaciones, solo 140 corresponden a hoteles”, especificó Chung.

El fin de semana pasado, miembros de Amasfac participaron en el seminario “Acapulco Resiliente: Otis, la tragedia y los seguros”, celebrado en el auditorio del hospital Aqua, en la zona Dorada de este puerto.

Felipe de Jesús Anzo, delegado de la organización en Acapulco, expresó que la industria aseguradora está abierta a que más personas se acerquen a los seguros y que la cultura del aseguramiento crezca, ya que sigue siendo incipiente.

En cuanto a las embarcaciones siniestradas, Lindsay Garnica indicó que apenas se han recibido reclamos de 220 pólizas de un universo estimado entre 600 y 700 embarcaciones. Reconoció la falta de un registro oficial, ya que los peritajes revelan la existencia de naves con matrículas duplicadas, piratas o incluso inexistentes.