* El secretario de Seguridad Pública dijo ante diputados que la falta de recursos y la inoperancia de las policías municipales no permiten avanzar en el restablecimiento de la seguridad

* Reconoció la labor de los elementos de la Policía del Estado a pesar de “los grandes detractores y campañas de desprestigio que permanentemente han orquestado en nuestra contra”
Gilberto Guzmán

En Guerrero hacen falta 8 mil policías, a lo que se suma la nula participación de las policías municipales, criticó el secretario de Seguridad Pública estatal, Pedro Almazán Cervantes, durante su comparecencia en la que aceptó que Guerrero ocupa el primer lugar nacional en homicidios dolosos y entre los primeros de los homicidios considerados de alto impacto, por lo cual se ha trabajado en la prevención del delito, pero el principal obstáculo es la falta de recursos económicos suficientes para avanzar en el restablecimiento de la seguridad.
Este martes, el funcionario compareció junto a los secretarios de Gobierno, Florencio Salazar Adame, y de Protección Civil, Marco César Mayares Salvador, ante diputados de las comisiones de Justicia, de Asuntos Políticos y Gobernación, de Estudios Constitucionales y Jurídicos, de Seguridad Pública, de Protección Civil, de Participación Ciudadana, de Derechos Humanos, y de Transporte.

Complicada situación en Guerrero

De entrada, Almazán Cervantes señaló que Guerrero ocupa uno de los primeros lugares a nivel nacional en la comisión de homicidios dolosos y otros delitos de alto impacto que generan incertidumbre, temor y desesperación, desconfianza y reclamos constantes a las autoridades responsables de la seguridad.
Sin embargo, comentó que las instituciones de seguridad presentan grandes rezagos e insuficiencias en equipamiento, capacitación, infraestructura, tecnología de la información, efectivos y desarrollo de la carrera policial.
Además, reconoció que los centros penitenciarios de Guerrero han sido reprobados por la Comisión Nacional de Derechos Humanos porque, entre otras deficiencias, la mayoría de ellos tienen instalaciones insuficientes, sobrepoblación, hacinamiento, falta de higiene y falta de servicios apropiados para mantener la salud de los internos.
El titular de la SSP expuso que esos rezagos se han traducido en una gran debilidad institucional que impide superar de manera contundente los retos que impone la delincuencia, así como garantizar de manera adecuada la seguridad de los centros penitenciarios y la reinserción social de las personas privadas de la libertad.

Resultados a medias, por falta de recursos

Subrayó que la falta de recursos suficientes impide un combate más efectivo a la inseguridad pública, y pidió a los diputados su apoyo para la asignación de “presupuestos extraordinarios acordes con la problemática y el rezago que presentan nuestras instituciones”.
Destacó que en el combate al crimen ha sido determinante el apoyo de las fuerzas armadas, como el Ejército y la Marina, y la Policía Federal, pero “la gran ausencia y falta de compromiso de las policías municipales siguen siendo una constante que dificulta enormemente alcanzar esos importantes objetivos”.
Entre los resultados de la Secretaría de Seguridad Pública estatal en el segundo año de gobierno de Héctor Astudillo Flores, Pedro Almazán enumeró: la detención de mil 881 personas por delitos del fuero federal, 577 detenidos por delitos del fuero común, 53 prófugos de la justicia con órdenes de aprehensión, 4 mil 466 responsables de faltas administrativas, 7 mil 138 por otras infracciones; en total, 14 mil 115 personas aseguradas, entre ellos cuatro objetivos prioritarios por ser generadores de violencia en Guerrero.
Mencionó que las labores de inteligencia permitieron liberar a 40 personas que estaban privadas de la libertad, además que se destruyeron 120 mil 877 plantíos de amapola con superficie total de 11 mil 685 hectáreas y 2 mil 82 de marihuana con superficie total de 185 hectáreas.
Se aseguraron también 15.79 toneladas de diversos estupefacientes, 3 mil 402 dosis de marihuana, 2 mil 394 dosis de piedra, mil 396 de cocaína, 220 de cristal y 18 de heroína, 839 kilogramos de semilla de marihuana, 84 kilogramos de sustancia base de heroína, 64 litros de goma de opio, y se destruyeron 16 narcolaboratorios rústicos para el procesamiento de droga.
Se aseguraron 557 armas largas, 835 armas cortas, 79 granadas de mano, 3 mil 113 cargadores, 96 mil 268 cartuchos de diversos calibres, 13 aditamentos lanzagranadas, 79 chalecos tácticos, 115 fornituras, 47 cartucheras, 175 teléfonos celulares, 368 radios portátiles.
Se aseguraron y recuperaron mil 943 vehículos de diversas marcas, 379 motocicletas, 1 millón 100 mil pesos mexicanos, 2 mil 800 dólares americanos, se recuperaron y regresaron a sus respectivos propietarios 150 cabezas de ganado vacuno.
Almazán Cervantes expresó su “más profundo reconocimiento” a los policías estatales que diariamente ponen su dedicación, esmero y profesionalismo para cumplir con su deber ante la sociedad, sin importarles “los grandes detractores y campañas de desprestigio que permanentemente han orquestado en nuestra contra, propios y extraños que se ven afectados en sus intereses con la enérgica labor que diariamente realizamos para contrarrestar las acciones de los grupos delictivos”.
Dijo que en Guerrero faltan cuando menos 8 mil policías estatales para realizar una labor más eficiente contra el crimen, a lo que se suma la nula participación de las policías municipales.
Mencionó que por los rezagos ya mencionados, ninguno de los 16 centros penitenciarios de Guerrero, incluyendo el Centro de Ejecución de Medidas para Adolescentes, reúne al cien por ciento las condiciones, características, equipamiento, recursos humanos y asignación de partidas presupuestales para garantizar la seguridad y exitosa reinserción social de las personas que se encuentran privadas de la libertad.
“Simplemente, la capacidad total instalada es de 3 mil 804 espacios, mientras que la población penitenciaria asciende a un total de 4 mil 573, lo que significa una sobrepoblación total de mil 173 personas privadas de la libertad, que equivale a un sobrecupo del 41.19 por ciento”, señaló el funcionario, pero haciendo la operación matemática los números no cuadran.
Sugirió que se gestionen recursos especiales para la construcción de un nuevo centro de reinserción social con capacidad para 2 mil 500 internos, que podría sustituir a los Ceresos de Acapulco, Chilapa y Chilpancingo, los más obsoletos, poco funcionales y menos operables por haber quedado en medio de la mancha urbana y presentar mayor deterioro en su estructura y falta de equipamiento.

Los cuestionamientos

En la etapa de preguntas y respuestas, participaron los diputados: María de Jesús Cisneros Martínez (MORENA), Iván Pachuca Domínguez (PAN), Jesús Martínez Martínez (PT), Ricardo Mejía Berdeja (Movimiento Ciudadano), Eduardo Cueva Ruiz (Partido Verde), Perfecto Rosas Martínez (PRD) y César Landín Pineda (PRI).
El perredista Perfecto Rosas cuestionó que en el informe del general Pedro Almazán no hubiera “un solo párrafo que dé cuenta de una evaluación objetiva de su desempeño”, porque por la exposición “la imagen que ofrece es que todo lo hecho está bien hecho y ha sido suficiente y oportuno”, mientras aumentan los delitos como el homicidio en general y el homicidio doloso, la extorsión y el robo a vehículos.
Pidió al funcionario informar por qué en el presupuesto del Fondo de Aportaciones para la Seguridad Pública hay un subejercicio en 2015 de 225 millones de pesos y en 2016, de 52 millones de pesos.
Además, que existe la sospecha de que la misma partida pero del 2017 hay otro subejercicio por 70 millones de pesos, porque se acordó una aportación de 283 millones 228 mil pesos, entre recursos federales y estatales, de los cuales se asignó a la Secretaría de Seguridad Pública casi el 70 por ciento, aproximadamente 155 millones de pesos, pero solo se reporta un ingreso por poco menos de 88 millones de pesos.
El secretario respondió a los diputados que el problema de la inseguridad pública aqueja a todo el país, no es un asunto exclusivo de Guerrero.
Insistió en que el gobierno estatal ha encabezado una lucha sin precedentes por combatir el delito, “de lo contrario se hubiera desbordado y no tuviéramos los resultados que hemos detallado en esta comparecencia”.
Dijo que no sería propio que se pusiera una calificación, pero los resultados están a la vista.
Insistió en que faltan recursos para seguridad pública pero los resultados son satisfactorios, “en lo personal me siento satisfecho”.
Reiteró que los policías estatales están dando su máximo esfuerzo, pero el número de efectivos no es suficiente, “tenemos el 30 por ciento de los elementos que debemos tener”.
Dijo que hay solamente 750 cámaras de video funcionando en Guerrero, pero se trabaja para reforzar la red de video vigilancia, aunque la falla principal, es la falta de recursos.

Grupos armados encubren ilícitos

Sobre los grupos de policías comunitarias, dijo que se analiza el destino que tendrán los grupos armados que operan al margen de la ley, sobre todo porque “se han utilizado a grupos sociales como fachada para cometer acciones ilícitas”.
“No permitiremos a nadie que realice acciones ilegales, hemos sido contundentes en frenar los delitos, en detener a aquellos grupos e individuos que pretenden hacerse justicia por su propia mano”, destacó.
Afirmó que se realizan requisas en Ceresos para decomisar aparatos de telefonía celular y comunicación, con el fin de evitar que desde su interior se cometan extorsiones, aunque también acusó que hay movimientos sociales orquestados por grupos que promueven la inconformidad ante las revisiones en centros penitenciarios.
En reiteradas ocasiones, argumentó que la principal falta de recursos es lo que limita las diversas acciones en el combate al crimen organizado.
En el caso de Chilapa y la violencia que se ha desbordado en la región, señaló que el lunes se reunió el Grupo de Coordinación Guerrero y se puso en marcha operativo para proteger a escuelas, proteger a los maestros y dar mayor confianza a la sociedad.
Detalló que para eficientar el combate a la siembra y tráfico de enervantes, se necesitaría el triple de efectivos, “se requiere reclutar a ocho mil policías para cumplir con estándares internacionales de la ONU, aunque esos estándares son diseñados para otros países pero en Guerrero contra la cultura de violencia que se ha generado, se requieren todavía más efectivos”.
“En prevención social del delito, nos hemos empeñado como nunca antes se hacía”, presumió el funcionario.