* Estudiantes exigen justicia y ponen en entredicho la versión de que Jhonatan Morales y Filemón Tacuba fueron victimados durante un atraco a pasajeros de una urvan
JESÚS SAAVEDRA
TIXTLA.— En medio de la exigencia de justicia, ayer se realizaron por separado los homenajes póstumos de cuerpo presente a los normalistas de Ayotzinapa Jhonatan Morales Fernández y Filemón Tacuba Castro, asesinados, de acuerdo con las autoridades estatales, en un asalto cuando viajaban como pasajeros en una unidad de transporte colectivo la tarde del martes pasado en la carretera Chilpancingo-Tixtla.
Los integrantes del Comité Estudiantil de la Normal Rural ‘Raúl Isidro Burgos’ advirtieron sobre lo ocurrido a sus compañeros que “no queremos impunidad, no lo vamos a permitir, estamos llegando al punto de decir ya basta de resistir ahora nos tocará actuar”.
Los homenajes en la explanada de esta normal rural se hicieron por separado, debido a los trámites administrativos que hicieron los familiares ante las autoridades ministeriales para reclamar los cuerpos de ambos jóvenes.
En esta misma explanada, hace nueve días eran recordados los 43 estudiantes desaparecidos hace dos años en Iguala, y ahora los asesinatos de otros dos más.
Este miércoles el luto vistió estas instalaciones de la Normal Rural. En la mañana, y por decisión de los familiares, se le ofreció un homenaje privado por parte de la planta docente, estudiantil y de los padres de los 43 normalistas desaparecidos al normalista Jhonatan Morales Fernández, originario de la comunidad de Saucitos, municipio de Tecoanapa.
Enseguida, el féretro con el cuerpo del normalista partió desde las instalaciones de esta escuela hacia esa comunidad de la región de la Costa Chica, a donde fue trasladado en una carroza funeraria escoltada por un autobús en el que viajaban compañeros del estudiante.
El cuerpo del segundo normalista fue reclamado más tarde por sus familiares y los trámites de su entrega duraron más tiempo. La segunda carroza con los restos de Filemón Tacuba Castro, originario de la comunidad de Pantla, municipio de Ayutla de los Libres, llegó a la una de la tarde y se le rindieron los mismos honores que su compañero Johnatan.
A los féretros de ambos jóvenes los colocaron en la explanada del plantel, se montaron guardias de honor, intervino la banda de guerra de la normal, participaron maestros y alumnos que exigieron justicia, y posteriormente la rondalla Romance de esta institución interpretó la canción Ayotzinapa que es considerado el himno de esta escuela.
El féretro de Filemón Tacuba, a diferencia del normalista a Jhonatan Morales, a petición de los familiares hizo un recorrido por el comedor y los dormitorios donde vivió los últimos cuatro años, pues ambos cursaban su último año de estudio en la licenciatura y precisamente la tarde del martes regresaban de Chilpancingo de sus prácticas profesionales cuando perdieron la vida a balazos en un presunto asalto.
El cuerpo de Filemón Tacuba fue trasladado a su comunidad en compañía de sus papás y también otro autobús acompañó a la carroza funeraria, pues se prevé que este miércoles se realicen los sepelios de ambos normalistas.
Nos tocará actuar si no hay justicia: Comité Estudiantil
A nombre del Comité Estudiantil, Ernesto Guerrero fijó una postura por estos asesinatos y afirmó que una vez más “la historia de nuestra institución se ha manchado de sangre. El 4 de octubre se anexa a las fechas del 12 de diciembre, del 6 de enero y 27 de septiembre. Los dos compañeros regresaban de sus prácticas docentes en la capital y (fueron víctimas) en esta ola de violencia que vivimos y que el gobierno no ha podido combatir”.
Lamentó que esa ola de violencia ahora “le tocó a nuestros compañeros, estamos de luto, nuestra exigencia es de justicia y se castigue a los responsables del crimen de nuestros compañeros y de las otras personas asesinadas y lesionadas” durante el asalto a pasajeros de una urvan del servicio público.
Ernesto Guerrero afirmó que esos crímenes son “un ejemplo claro de la ola de violencia que se vive a consecuencia de políticos corruptos, de autoridades coludidas con la delincuencia y que fuera de combatirla están en alianza con ellos. No estamos dispuestos a que nos sigan matando, que se quede en la impunidad en este y todos los casos de los compañeros asesinados, nuevamente pasa algo trágico en la institución”.
Dijo que cuando los “estudiantes, los maestros, los normalistas hacen una manifestación, llegan cientos de policías para contener la manifestación y por eso preguntamos ¿dónde están esos cientos de policías cuando suceden asesinatos?, porque es más fácil combatir a un estudiante que a un delincuente”.
Recordó que la semana pasada “asesinaron a unos soldados en Sinaloa y dijeron que van a ir con todo, y en este caso ¿no van a ir con todo porque no eran militares? Tenemos un motivo más para no darnos por vencidos en la búsqueda de nuestros 43 normalistas”.
Señaló que “hechos como este demuestran que es ineficaz” la estrategia contra la delincuencia, por lo que “exhortamos a las autoridades que cumplan con su deber, se esclarezcan los hechos y se lleve a juicio a los responsables. No queremos impunidad, no lo vamos a permitir, estamos llegando al punto de decir ya basta de resistir; ahora nos tocará actuar”.
Finalmente señaló que la versión que tienen es de esos hechos donde asesinaron a sus compañeros es que “fue alcanzada por un vehículo, los bajaron, les quitaron sus pertenencias y nos dicen que se alocaron, que iban en estado muy raro y empezaron a disparar, es lo que nos han informado testigos, fue una ola de violencia en la capital y en la carretera”.
Consideró que la versión de que se trató de un asalto es más bien una “especulación” de las autoridades, por lo que existe “desconfianza” de que pueda tratarse de “una campaña contra la normal”, y exigió que si no quieren que esto se piense, “que lo demuestren haciendo justicia”.
Hay una escalada de violencia contra la normal: Olivares
El presidente de la Red de Derechos Humanos de Chilapa, Manuel Olivares, condenó estos hechos y aseguró que “hay un incremento en la escalada de represión hacia esta normal”.
Añadió que los asesinatos de otros dos normalistas “en un asalto que dicen fue fortuito”, siembra “la duda y para nosotros no puede ser cierta esa versión”.
Olivares especuló que podría tratarse de “una campaña para desaparecer la normal y el gobierno tiene que demostrar que no es así. Lo van a hacer encontrando y castigando a los responsables. No es posible que el vocero diga que es acción de la delincuencia organizada y cuando se trata de detener o reprimir a manifestaciones de normalistas disponen de todos sus medios y en este caso dicen tener identificados, (pero) no se les detiene”.
El activista de derechos humanos dijo que lo ocurrido el martes “nos demuestra que su estrategia (de seguridad) no sirve, ha fracasado”, y aseguró que “la delincuencia organizada no podría operar sin la complacencia de las autoridades; exigimos que haya justicia y se detenga a los responsables”.
Recordó que “esos dos muchachos llegaron aquí persiguiendo un sueño que era tener una carrera, un empleo que les permitiera aliviar la pobreza en la que viven sus familias, y nuevamente se ha truncado el sueño de esos dos muchachos, de esas dos familias. Que las autoridades dejen ya de darle impunidad a la delincuencia organizada”, reclamó.
El señor Melitón Ortega, padre de uno de los normalistas desaparecidos en Iguala, dijo que en Guerrero “campea la impunidad en el caso de los 43 y ahora que estén atacando a los estudiantes es grave, es preocupante, vivimos en un estado que se dice democrático y hay impunidad, denunciamos estos hechos y acusamos al Estado de permitir la delincuencia; rechazamos esa agresión que consideramos que es una embestida contra la Normal Rural”, aseguró.