Silencio recomendable en estrategias
Por Felipe Victoria
Ni modo, no es con florecitas como la paz y el orden se conquistan…
El día que mucha gente se aficionara por adentrarse en nuestra historia patria otro gallo nos cantaría, pero lamentablemente la cajita de cristal llamada televisión enajenó a la mayoría, acabando con el buen hábito de la lectura y la cultura verdadera.
Para amolarla, las maravillas tecnológicas del Internet en aplicaciones a Tablets y equipos de telefonía móvil dieron la puntilla…
Si viéramos gente con un libro en las manos y aprovechando el tiempo para adentrarse en el contenido en vez de andar como zombis, o hasta en los mentideros políticos llamados cafeterías atendieran a la charla entre contertulios en vez de estar con el pico clavado en los celulares, sería más provechosa la dicha inicua de perder el tiempo entre taza y taza con aromático grano molido percolado en exclusivos lugares.
Ideal sería que al encontrarse en esos lugares, por atención a los demás y educación, todos apagaran sus aparatitos para prestar atención en persona a las personas cuando las tienen de frente…
La gente “moderna” cibernetizada cree que ya no hay que estudiar porque todo lo que quiera lo consulta a través del Internet en su aparatito portátil, que utilizan hasta para hacer sumas, restas, divisiones y multiplicaciones.
No faltan quienes en torno de una mesa de cafetería tienen metido el audífono para escuchar algún programa por la radio, o la vista fija en la pantallita donde se mira televisión. El caso es que apenas se saludan, se despiden y se van sin haber disfrutado de una charla amena y constructiva…
Qué felices éramos cuando no estábamos esclavizados a los celulares. Quien quería comunicarse sabía a qué hora marcar los números del negocio, la oficina o la casa para encontrarnos y asunto arreglado.
En el oficio policiaco y de investigaciones nos aconsejaban nunca decir a donde iríamos ni de donde veníamos; esa premisa hoy en día parece ignorada u olvidada por los entusiastas políticos empeñados en atraer reflectores para hacer declaraciones a veces chimoltrufiescas, que más se tardan en que se hagan públicas en que algún otro funcionario los contradiga, quedando ambos expuestos al ridículo.
Sí, por eso la urgente necesidad de que el gobierno estatal guerrerense cuente ya con un vocero o vocera y que todos los demás funcionarios cierren el pico en cuanto los temas policiales que oficialmente se revelen, que ya con los embates en las redes sociales tendrán suficiente para ser desmentidos o confirmados…
Cuanta falta le están haciendo a México personajes investigadores de profesión como aquella pléyade emanada del Heroico Colegio Militar en 1947, con que integraron la primer Dirección Federal de Seguridad, con facultades relativas sobre todas las corporaciones policiacas mexicanas existentes.
Ya parece que iban a andar perdiendo el tiempo en foros aplaudidores dando a conocer los planes de acción futura contra la delincuencia organizada. Más bien eran detectives herméticos y estrategas cautelosos para actuar por sorpresa contra grupos de malhechores organizados en pandillas, bandas, gavillas o guerrillas; el incipiente narco ya existía pero aún no era la pesadilla nacional y como sea estaba bajo control.
Algo habrán escuchado o mirado alguna vez en la televisión o el cine…¿creen ustedes que cuando la delincuencia contrabandista de licor traía de un ala a los habitantes de Chicago en Illinois o en Nueva York iban a anunciar públicamente la creación de grupo de “intocables” al mando de Elliot Ness?
Se tendría que saber de todos modos porque a la prensa nadie se le escapa, pero después de que asestaran los primeros grandes golpes a los gánsteres. Discreción absoluta era la regla del juego policiaco y hermetismo operativo…
Hoy por desgracia los primeros sospechosos de estar amafiados, son algunos funcionarios que intervienen en los faraónicos eventos disque por la seguridad pública en esas morrocotudas comisiones interinstitucionales, donde hacen mucho ruido tomándose la foto pero resultan pocas nueces…
Para colmo el punto más sensible de los C-4 fue vulnerado por la ley de plata o plomo y por eso está entrando al relevo forzado personal castrense, que ya sabe que le harían corte marcial si abren el pico y revelan cualquier mínimo detalle…
Yo pregunto si los altos funcionarios que participan en esas periódicas reuniones sobre cuestiones de seguridad, ¿han sido sujetos al control de confianza y están acreditados y certificados como se le exige al más humilde gendarmito mal pagado de crucero?
El terrible trompo que el gobernador Héctor Astudillo Flores se está echando a la uña con el problemón ancestral de la siembra, cultivo y tráfico de la amapola y sus derivados requiere de prudente secrecía absoluta y no de estarle avisando a los cárteles “que ahí les van”…
Si fanfarronean con que miles de soldados llegarán en busca de lacrosos, estos huyen o guardan sus disfraces de guerrilleros maleantes y continúan como si nada en las poblaciones asoladas, por eso luego nunca los encuentran.
Se les ha olvidado el sigilo y la astucia contra la delincuencia que no tiene protocolos para actuar por sorpresa, pero además cuenta con mucha información desde dentro de las corporaciones y con padrinos poderosos en la alta burocracia…