Josefina Aguilar

 

Entre un 10 a un 15 por ciento de los casi 17 mil trabajadores que conforman la plantilla laboral del gobierno del estado, eran personas que no trabajaban, ni tenían asignada ningún área, ni carga laboral, y ahora han sido llamados a concentrarse a fin de que devenguen su salario, informó el director general de Administración y Desarrollo de Personal, Jaime Ramírez Solís.

Luego de haber asumido el cargo el pasado mes de octubre, el funcionario estatal envió una circular a toda la base trabajadora, en la que le informó la conclusión de los horarios flexibles a todo el personal y que debían de concentrarse todos en sus áreas y horario de trabajo.

De entrada, dijo que al hacer una revisión de la nómina del sector central del Gobierno del Estado, encontró una plantilla de trabajadores muy abultada de alrededor de 16 mil 800, lo que genera problemas con gente que quiere tener mucha comodidad en cuanto a sus horarios.

Refirió que había personal del que no se sabía cuál era su hora de entrada ni salida, y aunque reconoció que hay actividades operativas en las que los trabajadores no necesariamente tienen que checar, se dio a la tarea de cerrar los horarios flexibles y concentrar al personal.

Aunque se negó a llamarlos “aviadores”, Ramírez Solís reconoció que en esta revisión de la plantilla laboral del Gobierno del Estado encontraron gente que no trabajaba con una actividad ni un horario especifico, en un porcentaje de entre 10 a un 15 por ciento, a quienes comenzaron a concentrar para verificar sus cargas de trabajo.

Reconoció que esta decisión generó inconformidades y malestar en los empleados, pero justificó la medida porque es necesaria para establecer el orden que busca implementar la actual administración a fin de tener una plantilla laboral más productiva.

Para fortalecer dichas acciones, Ramírez Solís dijo que ha tenido reuniones con representantes sindicales y de organizaciones independientes, para comunicarles las nuevas disposiciones y del por qué es necesario un reordenamiento, coincidiendo todos que el personal más comprometido es precisamente el sindicalizado.

Comentó Ramírez Solís que el resultado de estas medidas que en algún momento pudieran resultar poco populares, podrán comenzar a reflejarse a partir de este año 2016, en el que esperan concluir con este reordenamiento laboral, hasta contar con una nómina más delgada, menos abultada.

Aseguró que en esta acción no están afectando a ninguna persona, porque no se está despidiendo a nadie ni están descontando salarios, “únicamente le estamos poniendo orden a la actividad, salvo si incurren en algunas incidencias si se les aplica” una sanción, advirtió el funcionario. (Notymás)