* Los familiares de los normalistas desaparecidos en Iguala se fueron a sus casas con motivo del Día de Muertos, reveló su vocero

 

ALONDRA GARCÍA

Los padres de los 43 estudiantes de Ayotzinapa desaparecidos en Iguala, el año pasado, aún no valoran la posibilidad de ir a buscarlos en Carrizalillo, a pesar de que ese pueblo minero fue utilizado como guarida por el cártel ‘Guerreros Unidos’ durante al menos cuatro meses.
El vocero de los padres de familia, Felipe de la Cruz Sandoval, dijo que esa posibilidad no ha sido analizada, porque la mayoría de los padres se encuentran dispersos a causa de las fiestas tradicionales por el Día de Muertos.

De acuerdo con testimonios de vecinos del ejido de Carrizalillo, la madrugada del 27 de septiembre hubo mucho movimiento de gente armada que llegó de Iguala; aseguran que ese día se utilizó maquinaria pesada para mover material que sería utilizado para repavimentar la avenida principal.
Los pobladores no descartan la posibilidad de que los 43 normalistas desaparecidos hayan sido enterrados clandestinamente en Carrizalillo por los sicarios de ‘Guerreros Unidos’, a quienes se la Procuraduría General de la República les atribuye la desaparición de los jóvenes.

El también maestro afín a la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación en Guerrero dijo que en el transcurso de la semana analizarán y valorarán las implicaciones que tiene subir hasta la zona minera del municipio de Eduardo Neri, a realizar una búsqueda.
Meses después de la desaparición de los normalistas, el ahora extinto promotor de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG), Miguel Ángel Jiménez Blanco, criticó la negativa de los padres de los jóvenes a participar en las acciones de búsqueda en las fosas clandestinas halladas de Iguala.
Jiménez Blanco criticó en su momento que los padres privilegiaran los viajes al extranjero para informar sobre su lucha o el bloqueo de carreteras para recaudar dinero, en lugar de participar activamente en las acciones de búsqueda de sus hijos.
El promotor de la UPOEG, quien fue precursor en la búsqueda de fosas clandestinas, dedicó los últimos meses de su vida a buscar personas desaparecidas en el municipio de Iguala, hasta que fue asesinado.
La oferta de los pobladores de Carrizalillo sobre la búsqueda de personas en fosas clandestinas en esa zona, sí fue aceptada por los integrantes del colectivo Los Otros Desaparecidos, que este martes 3 de noviembre, en la parroquia de San Gerardo, en Iguala de la Independencia, solicitarán el acompañamiento de la Procuraduría General de la República (PGR) para que los resguarden durante su búsqueda.
Ellos tienen ubicada una barranca conocida como Las Palomas, en donde se les ha dicho que existen restos humanos. Mientras que en el paraje de Los Manguitos hay el mismo reporte.