* Sin embargo, María de Jesús Tlatempa calificó lo que les pasó a los estudiantes el 26 de septiembre del año pasado como “un crimen de Estado”

 

ALONDRA GARCÍA

 

María de Jesús Tlatempa, madre de un estudiante de Ayotzinapa desaparecido, asegura que su hijo y sus compañeros están vivos y en poder del gobierno federal.

La mujer basa su afirmación en los testimonios que ha escuchado de la gente de Iguala, ciudad que fue escenario de una serie de ataques armados contra los estudiantes de Ayotzinapa la noche del 26 y madrugada del 27 de septiembre de 2014, los cuales dejaron un saldo de seis muertos y 43 normalistas desparecidos, entre ellos su hijo.

Otro detalle que llama su atención, es que dos meses después de los hechos pudo contactar al teléfono celular de su hijo José Eduardo Bartolo Tlatempa.

“Yo le marqué a mi hijo a su celular, ya después de dos meses y entró la llamada. Me contestó un hombre, yo sabía que no era mi hijo, pero le alcancé a decir ‘a donde quiera que estés, hijo mío, te quiero mucho y te voy a estar esperando’. Por eso aquí estoy, un año después sigo esperando a mi hijo y a sus compañeros”, narró la mujer que desde 2014 vive en la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa.

Para María de Jesús Tlatempa, la verdad histórica de la Procuraduría General de la República (PGR) fue una invención que carece de coherencia y que poco a poco se ha ido desmoronando.

Asegura que su hijo y sus 42 compañeros no fueron incinerados en el basurero de Cocula, como afirma la PGR, porque esa noche la lluvia fue intensa.

“Nosotros queremos que se esclarezcan los hechos, porque somos pobres, pero no tontos”, sentenció

Sin embargo, la mujer aseguró que lo ocurrido en Iguala fue “un crimen de Estado” que atestiguaron los pobladores, quienes saben qué fue lo que realmente ocurrió.

“La misma gente (de Iguala) sabe dónde están nuestros hijos, pero no quieren hablar porque saben que los tiene el gobierno. Por eso el gobierno tiene que entregarnos a nuestros hijos. ¿Cómo es posible que el gobierno nos haga tanto daño?, ¿cómo es posible tener un gobierno así?”, pregunto en tono de reclamo.

El pasado 26 de octubre, el exgobernador Rogelio Ortega Martínez concedió una entrevista en la que se dijo satisfecho por el trabajo que realizó al frente del gobierno de Guerrero, pues aseguró que fue capaz de detener una “crisis preinsurrecional”, ya que la entidad estaba “al borde de una guerra civil” debido a las movilizaciones y el descontento social que generó la desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa.

Al respecto, María de Jesús Tlatempa aclaró que los padres de los 43 nunca pensaron en iniciar una revolución ni una guerra civil y que nunca han utilizado armas. “La guerra es de ellos, del gobierno, es su guerra sucia contra nosotros, nos quisieran desaparecer como han hecho con los demás, pero gracias a Dios están cayendo todas sus mentiras”, sentenció.

La madre del joven desaparecido agradeció el apoyo que la sociedad civil les ha brindado en la búsqueda de justicia y del paradero de sus hijos.

“Gracias a la ciudadanía estoy viva, porque me alimentan, me dan de comer. Yo le agradezco a Dios que pobremente, pero aquí estamos, aunque sea tortilla con sal, lo que nos ofrezcan para nosotros es bienvenido”, expresó.