Se ha registrado un alarmante incremento en los casos de abuso sexual infantil en Zihuatanejo, afectando a aproximadamente 500 niños y niñas, muchos de los cuales han sido víctimas de abusos perpetrados por familiares cercanos.

Brisia Quintana González, representante de la Red de Mujeres Constructoras de Paz, ha destacado la preocupación ante esta problemática silenciada, especialmente al observar que varios estudiantes de primaria han compartido experiencias similares.

Son los propios niños y niñas quienes han denunciado estos abusos directamente en las escuelas, señalando a sus agresores, en su mayoría padres, hermanos, tíos y padrinos.

Existen diversos factores que contribuyen a la vulnerabilidad de los menores frente a estos hechos, si bien el principal de todos es la desintegración familiar.

La revelación de estos casos subraya la urgente necesidad de abordar este problema en la comunidad, involucrando a todos los sectores, pues está en juego la estabilidad emocional y la salud mental de los menores.