MAREMÁGNUM Por Ricardo Castillo Barrientos

Como ya se comentó en la entrega anterior, concluyó en definitiva el Festival Franco Mexicano (FFM), conocido durante 19 años como Festival Francés, que año con año se realizaba exitosamente en el puerto de Acapulco. 

Este magno evento se vino abajo por el desinterés y falta de apoyo de autoridades estatales y municipales. Gobiernos anteriores aportaban recursos y apoyo logístico, ahora nada, solo excusas. 

La última edición se realizó durante los días 13 y 14 de mayo y estuvo presidida por su coordinador Karim Gilles Djellit, fiel promotor de nuestro destino turístico en la comunidad francesa de la CDMX y en la nación europea.

En esas fechas se celebraron una serie de eventos en conmemoración de la riqueza cultural de dos naciones: Francia y México. En esta última edición, se rindió homenaje a la fusión cultural de ambos países a través de la gastronomía y las artes.

El Comité Organizador expresó su agradecimiento a los artistas, chefs, músicos, directores de cine y todos aquellos participantes en las diferentes ediciones, así como al Fuerte de San Diego, Museo Soumaya y Museo de Arte Popular.

La conclusión del Festival Francés se debió a ciertos desafíos relacionados con la falta de interés, la necesidad de un dialogo constructivo, así como la carencia de apoyo de los gobiernos estatal y municipal.

Fincando esperanzas en el futuro inmediato del respaldo institucional, Karim Gilles, aseguró que se está haciendo un replanteamiento del Festival y regresarlo a su esencia original, si fuera posible para la vigésima edición, con el compromiso de seguir trabajando en la promoción de la cultura francesa en México y de la cultura mexicana en Francia.

Se indicó que se continuará fomentando la educación y la cultura entre Guerrero y Francia,  en los ámbitos gastronómico, turístico y de la salud.

Resulta lamentable perder un evento tan importante, cuando estamos urgidos de atraer grupos y actividades turísticas que signifiquen derrama económica y coadyuven con la economía local.   Así lo deben valorar las autoridades turísticas, culturales y los propios gobernantes, a quienes les atañe directamente, a fin de evitar se sigan perdiendo eventos de trascendencia para el puerto.

Marea Baja.- Juan Sánchez  Andraca es un prolífico escritor y librero, oriundo de Chilapa, que se consagró a las letras y a la venta de libros de diversos autores, incluyendo los suyos.

Juanito es todo un personaje en la literatura guerrerense y sus dones afables le han generado una pléyade amistades, simpatizantes y admiradores a su obra literaria y sensibilidad humana.

Por ese y otros motivos, la Sociedad Mexicana de Geografía y Estadística, Capítulo Iguala, le realizará un magno homenaje, el día jueves 25 de mayo, a las 18:00 horas, en el Museo de la Bandera y Santuario de la Patria, de la histórica ciudad de Iguala de la Independencia.

Entre sus obras más destacadas, figuran, “Un mexicano más”, “Allá en el río”, “Debe amanecer”, “A pesar de todo”, “Zitlala, lugar de estrellas”, y otros.    

Marea Alta.- Oportuna pero ridícula la multa que impuso la dirección de Ecología Municipal de 18 mil pesos, a una empresa contratista de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), por haber talado 6 árboles de roble sembrados hace 20 años, cerca de la bodega de limón por el rumbo de La Sabana, del municipio de Acapulco.

La irrisoria multa también debe aplicarse a la CFE, por ser la responsable directa del ecocidio, además de resembrar 10 árboles de la misma especie por cada árbol talado.

Tanto a la CFE como otras dependencias gubernamentales y algunos particulares, se les hace fácil devastar árboles para solucionar problemas de espacio, afectando a la madre naturaleza. Nacho Terrazas, vecino de La Sabana, puso el grito al cielo para que se aplique un castigo ejemplar a esa dependencia paraestatal, otroraconocida como empresa de clase mundial. 

Maremoto.- La prepotencia e indiferencia son características de funcionarias primerizas que llegan de golpe y porrazo a ocupar un cargo relevante como la secretaria de Cultura (Secultura), Aída Martínez Rebolledo . Esto viene a cuento porque después de guardar hermetismo sobre la convocatoria para designar al nuevo director de la Orquesta Filarmónica de Acapulco (OFA), por fin dio señales de vida.

El próximo 19 del presente mes, se reunirán por primera vez, una comisión de músicos de la OFA, a la que no asistirá la Titular de Secultura y enviará a un funcionaria segundona para escuchar las peticiones de los integrantes de esta formidable orquesta, que son del dominio público.

Da la impresión que existen intereses aviesos por desmantelar a la OFA, no se puede entender de otra manera, ante una problemática asfixiante que podría provocar la desbandada de tan profesionales elementos musicales.