Alejandro Gómez 

Si bien desde hace 18 años no se han presentado casos de rabia canina y más de dos décadas sin esa enfermedad en humanos, pero la proliferación de perros callejeros en Taxco sigue siendo unproblema de salud pública, debido a que en el último censo se contabilizaron casi 8 mil animales en las calles de la ciudad y eso representa un aumento del 10 por ciento en comparación con fechas anteriores, informó el titular de epidemiología del centro de salud urbano, Carlos Guerra Álvarez.

El galeno explicó que la problemática no es atribuible a la reproducción canina en la vía pública, porque de cada seis nacimientos solamente sobreviven dos cachorros por la falta de atención, alimentación y cuidados, sino más bien a la irresponsabilidad de la población que compra mascotas principalmente en días festivospero al paso de medio año se fastidian de ellos y los echan a las calles, “de ahí viene el aumento de perros callejeros; la gente los convierte en eso”.

Guerra Álvarez dijo que en censos anteriores se tenía el registro de casi 7 mil caninos callejeros en Taxco pero la cifra subió considerablemente en fechas recientes, toda vez que varios sectores de la sociedad no tienen la capacidad de entender que a las mascotas se les cuida y atiende en todos los sentidos, por lo que optan por abandonarlos en las calles y con ello contribuyen en la problemática de salud pública, “en fiestas decembrinas es cuando más se compran caninos para regalarlos”.

Puntualizó que el mercado municipal “Tetitlán” es la zona con el mayor número de caninos callejeros, debido a la venta diaria y desperdicio inconsciente de alimentos por comerciantes y consumidores, pero también el rastro municipal registra una incidencia importante de fauna canina por las labores de matanza de animales y de donde se desprenden olores y sobrantes de carne.

Apuntó que en el área rural las comunidades de Tlamacazapa, Acamixtla, San Francisco y San Miguel Acuitlapan encabezan la lista con cantidades considerables de esos animales, debido a la falta de conciencia ciudadana en el sentido de que les gusta tener perros para cuidar sus casas pero se niegan a cuidar a sus mascotas e incluso, durante las jornadas de vacunación antirrábica no permiten la aplicación del biológico en los caninos.

Carlos Guerra Álvarez, advirtió que la defecación de perros callejeros provoca severas infecciones gastrointestinales en las personas, por el contacto directo de las heces con los expendios de alimentos, “hemos insistido que en el problema la fauna canina no es la reproducción en las calles, sino la irresponsabilidad de la gente que luego de seis meses de comprar una mascota se fastidia de cuidarla y la abandona”.

El funcionario de salud dio a conocer que no se tiene registro de jaurías que hayan atacado a otros animales como ocurrió en otro tiempo por la falta de alimentación, pero reconoció que la problemática se ha incrementado por la falta de un centro de acopio donde se tenga el control de los caninos capturados, así como su vacunación, esterilización y curación, “existe gente principalmente en el centro de la ciudad, que alimenta a los perros callejeros”.