• Deivi Barrientos admitió que después del asesinato de Vladimir Román, recibió una llamada del periodista, asesinado el lunes pasado, quien lo responsabilizó de ese homicidio, “pero en ningún momento respondí con amenazas, como se me acusa”

Jesús Saavedra/Redacción

El comandante de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG) en El Ocotito, municipio de Chilpancingo, Deivi Barrientos Salazar rechazó estar relacionado con el asesinato del periodista, Fredid Román Román, y dijo estar abierto a que lo investigue la Fiscalía General del Estado (FGE).

El jefe de la policía comunitaria ofreció este miércoles una conferencia de prensa en la comisaria de El Ocotito, que se ubica a unos metros de la carretera federal que comunica con el puerto de Acapulco, acompañado del comisario, Julio César Almazán Castro.

Explicó que tuvo que ofrecer esta conferencia de prensa, luego que fuera señalado por un familiar de Fredid Román de haber amenazado de muerte al periodista luego del homicidio del hijo de este último, en julio pasado.

“No tengo nada que ver con el homicidio, me deslindo de este lamentable hecho”, afirmó.

Ante el señalamiento público que hizo Pedro Román, quien dijo ser sobrino del periodista asesinado, Barrientos Salazar expresó su disposición a ser investigado por la FGE, porque “el que nada debe nada teme”, y adelantó que se va a presentar de manera voluntaria a declarar.

Sostuvo que por su labor en la UPOEG no puede viajar a Chilpancingo y no tiene recursos para tener presencia de personas armadas en la capital, además que argumentó “cómo voy a atacar a una persona con la que no tengo ningún problema”.

Aseveró que por su labor al frente de la Policía Comunitaria en el valle de El Ocotito lo han querido vincular a hechos delictivos, pero que hasta el momento nadie le ha podido comprobar alguna acción ilícita.

También se refirió a unas acusaciones en redes sociales de un supuesto sobrino y aseguró que “es un nombre falso para inculparme, eso es falso y no tengo ningún sobrino de ese nombre, estamos a la espera que las autoridades nos requieran y aclaremos lo que sea necesario”.

También acusó que uno de los hijos de Fredid Román estuvo involucrado en el asesinato del secretario de la Comisaría de El Ocotito, Bertín Ubando Jaimes, ocurrido el 1 de julio pasado.

Señaló de manera directa a Cristian Román, hijo de Fredid Román, quien el 1 de julio acudió a reclamar el cuerpo de su hermano que había sido asesinado cuando repartía pollo en El Ocotito, y como no quisieron entregarles el cuerpo, asesinó a Bertín Ubando Jaimes.

Barrientos Salazar dijo que desde esa fecha ha recibido amenazas contra su persona.

“Sobre la muerte del compañero Bertín, todos sabemos quién fue. Lo hizo a la luz del día, delante de toda la gente, gente que viene a surtir sus despensas, y todos ellos ya nos hicieron sus declaraciones por escritas, firmadas de quién fue, y ahí decimos nosotros qué está haciendo el gobierno para empezar a actuar si hay pruebas contundentes”, explicó.

Recordó que en aquella ocasión también lo acusaron en redes sociales de ser el responsable del asesinato de Vladimir Román, el hijo de Fredid Román, quien se dedicaba a la distribución de pollo en el valle de Ocotito.

Afirmó que varios familiares del periodista asesinado, en su mayoría sobrinos, están relacionados con un grupo delictivo y son los responsables de cometer diversos delitos, entre ellos homicidios y desaparición de personas.

Admitió que después del asesinato de Vladimir Román, recibió una llamada de Fredid Román, quien lo responsabilizó de la muerte de su hijo, “pero en ningún momento respondí con amenazas, como se me acusa”.

El comandante de la UPOEG aseveró que continuará su labor como comandante de la policía comunitaria de El Ocotito, porque tiene el respaldo de las autoridades de la población, y descartó tener vínculos con algún grupo del crimen organizado.