• El responsable de la Diócesis Chilpancingo-Chilapa dijo que “constitucionalmente hay policías, verdaderas comunitarias, pero ya han sido rebasadas” y están infiltradas por “el narcotráfico”

Redacción

“Hace mucho que llegué a esta Diócesis, hace 6 años, y eso ya lo había dicho: que las policías comunitarias estaban infiltradas por el narcotráfico”, declaró el obispo Salvador Rangel Mendoza.

En declaraciones que hizo a la agencia API después de oficiar la misa de una de la tarde en la Catedral de Chilapa, el prelado ejemplificó que nada más en este municipio están la comunitarias del Rincón de Chautla y Alcozacán, o en la sierra, que son policías comunitarias, pero también sirven a los grupos delincuenciales.

Rangel Mendoza indicó que no se puede tapar el sol con un dedo: “claro que constitucionalmente hay policías, verdaderas comunitarias, pero ya han sido rebasadas y coludidas por el crimen organizado”, insistió.

Sobre las protestas de normalistas de Ayotzinapa que obligaron a que le gobernadora electa Evelyn Salgado suspendiera un evento en Tixtla, el obispo consideró que es un error que cometen los estudiantes, porque ellos necesitan más del gobierno estatal, que el gobierno estatal de ellos.

“Yo diría que si van a emprender esta guerra de unos para con otros, pues no tiene sentido, porque ya como quiera ella (Evelyn) es la gobernadora electa, y creo que el camino es el diálogo y el acercamiento para ayudarnos unos a otros”, expuso.

Consideró que hay mucha “mano blanda” de parte del gobierno federal y estatal hacia los normalistas, porque cuando los alumnos de Ayotzinapa bloquean la autopista nadie los quita y nadie los molesta, pero cuando entra otro grupo, inmediatamente interviene la policía o la guardia nacional.

Salvador Rangel opinó que esto fue una descortesía de parte de los estudiantes, quienes pierden más, porque la gobernadora no tiene necesidad de ellos. (Con información de API)