• *Román Meyer privilegia sólo a las empresas de sus amigos y allegados, adjudicándoles los contratos para ejecutar proyectos en Acapulco, afirmó José Luis Cuevas, de la Asociación de Empresas Constructoras de Guerrero

Ana Lilia Torres

ACAPULCO.— Integrantes de la Asociación de Empresas Constructoras de Guerrero denunciaron que persisten las anomalías y corrupción en la asignación de obras por parte del titular de la Secretaría de Desarrollo Agrario y Territorial Urbano (Sedatu), Román Meyer Falcón, quien se dedica a beneficiar a empresarios que son sus amigos o allegados.

En conferencia de prensa, el presidente de dicha asociación, José Luis Cuevas Pano señaló que los empresarios locales fueron excluidos nuevamente por Sedatu, ya que otorgó el contrato a la empresa Sapbe, S.A. de C.V. de México para ejecutar la segunda parte del proyecto de remodelación del Parque Papagayo de Acapulco.

Acusó al titular de la Sedatu, Román Meyer Falcón de privilegiar sólo a las empresas constructoras de sus amigos y allegados, adjudicándoles los contratos para ejecutar proyectos de obras en Acapulco.

Ante el malestar de los constructores locales por verse excluidos, dijo que han solicitado diversas audiencias con el titular de la Sedatu, pero él se ha negado a recibirlos.

Cuevas Pano reprochó que Román Meyer sigue cometiendo anomalías en los procesos de licitación de obras y por ello hizo un llamado al presidente de la república Andrés Manuel López Obrador a poner mayor atención a esta situación en Sedatu.

Manifestó que el funcionario federal no les ha informado cuales son los criterios para adjudicar a las mismas compañías los contratos de obras, por lo que piden acabar con el favoritismo en esa dependencia federal.

El dirigente de los constructores refirió que la primera etapa de remodelación del Parque Papagayo fueron asignadas a empresas foráneas por la cantidad de 60 millones de pesos.

Otras obras asignadas a compañías foráneas fueron el Polideportivo Azteca en la unidad habitacional El Coloso, que incluye el mercado y la escuela secundaria 52 en  la zona Diamante de Acapulco, las cuales se le otorgaron a la empresa GEUR por 96 millones 649 mil pesos.

Finalmente, Cuevas Pano pidió a nombre de los constructores al presidente López Obrador que intervenga para acabar con los actos de corrupción en Sedatu.