* La Comisión Nacional de Derechos Humanos emite recomendación sobre los hechos ocurridos en Iguala, el 26 de septiembre de 2014, que considera es “un caso abominable”
CIUDAD DE MÉXICO.— El próximo lunes 3 de diciembre, ya como presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador firmará el decreto para crear la Comisión Especial que investigará el caso Ayotzinapa, ante la presencia de los padres de los 43 normalistas que desaparecieron el 26 de septiembre de 2014 en Iguala, después de ser atacados por policías municipales y sicarios del grupo delictivo Guerreros Unidos.
La desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa “es un caso abominable” y emblemático de la descomposición institucional y social en México, dijo hoy la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) al presentar un exhaustivo informe del caso.
Desde la perspectiva de los derechos humanos, Ayotzinapa representa “el momento crítico” que el país vive en materia de violencia, inseguridad, corrupción e impunidad, dijo el ombudsman nacional, Raúl González Pérez.
El 26 de septiembre de 2014, estudiantes de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa fueron atacados por la policía municipal de Iguala —municipio que era gobernado por el PRD—, cuyos elementos entregaron a 43 de ellos a un grupo delictivo, que los asesinó e incineró en un basurero de Cocula, según la versión oficial de la Procuraduría General de la República que atrajo la investigación.
Al presentar un informe y una recomendación sobre el caso, González Pérez dijo que “la verdad no puede sujetarse a intereses o coyunturas políticas”, por lo que la CNDH se acercó al caso con una investigación exhaustiva, tecnológica y científica.
Añadió que “la muy grave y lamentable colusión entre autoridades y organizaciones criminales ocasionó la pérdida de la vida de 6 personas, lesiones a 42, y la desaparición forzada de 43 más”, dijo sobre los hechos.
Denunció que las omisiones y la indolencia de las autoridades de impartición de justicia contaminó y provocó que se perdieran pruebas, que no se agotaran todas las líneas de investigación y que hubiera acusaciones de sospechosos mal formuladas, lo que ha hecho que no puedan ser juzgados y que subsista la impunidad.
González Pérez dijo que el “desaseo y poco profesionalismo” en las investigaciones, particularmente la PGR, hicieron que se subestimara el hallazgo de más de un centenar de fragmentos de hueso y odontológicos, que con pruebas de ADN pudieron dar pistas del destino de los estudiantes.
Estos fragmentos serían suficientes para concluir que cuando menos los cuerpos de 19 personas fueron incinerados en el basurero, por lo que el ADN determinaría si son o no de los desaparecidos de Ayotzinapa ya que “era una práctica frecuente” del crimen organizado quemar cadáveres en esa zona, subrayó.
“La verdad también ha sido una de las víctimas en el caso Iguala” apuntó al acusar a las autoridades de dar información sesgada, parcial o nula, con lo que desorientó, confundió y generó incertidumbre en la opinión pública.
Como ejemplo del sesgo que se le dio a los hechos, la CNDH destacó que el gobierno mexicano haya dado por sentado que los 43 estudiantes habían sido asesinados.
“México es un país en el que, con frecuencia, la verdad se niega o esconde”, denunció González Pérez.
De acuerdo con el ombudsman, “este caso es el más ominoso y complejo en la historia de la CNDH”, y destacó que la desaparición de los 43 estudiantes “social y políticamente marcó un antes y un después” en el país.
Un crimen como el ocurrido esa noche “solo pudo ocurrir por la penetración del crimen organizado en las estructuras del gobierno”, dijo, y añadió que se debe garantizar que algo así nunca vuelva a ocurrir.
La CNDH afirmó que “corresponderá a las nuevas autoridades enderezar y continuar las investigaciones penales del caso, para lo cual esta recomendación constituye un punto de partida y una guía de lo que falta por hacer”.
La recomendación sintetiza “las más de un millón de hojas y 1.255 tomos que comprende la investigación, la cual constituye la mayor aproximación a la verdad que hasta hoy se tenga en el presente asunto”, apuntó.
El secretario de Gobernación, Alfonso Navarrete Prida, declaró que la administración saliente perfila aceptar la recomendación de la CNDH, y que de ello dará constancia a más tardar el próximo viernes, último día de gestión de Peña Nieto, quien será sucedido el sábado por Andrés Manuel López Obrador. “No pasará de mañana o pasado mañana sin que lo podamos decir”, dijo Navarrete a la prensa.
“De antemano lo señalo, las recomendaciones de la CNDH se deben de aceptar, se deben de cumplir y se deben de profundizar”, añadió. (Sin Embargo)