* El representante de Morena en el IEPC, quien criticó a Félix Salgado, a Adela Román y a Abelina López por haberse reunido con el mandatario estatal, ahora justificó esa reunión a la que “no le veo nada especial”
* Acusó que Armando Ríos y Sebastián de la Rosa, ahora ambos experredistas, se hicieron millonarios porque lucraban con proyectos productivos, y eso se acabará con las nuevas coordinaciones estatales
Jesús Saavedra
La próxima secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, se reunió con el gobernador de Guerrero, Héctor Astudillo Flores, para precisarle que el objetivo de nombrar coordinadores estatales del gobierno federal en los 32 estados, es acabar con “los negocios a partir de programas y dependencias federales”, aseguró ayer Sergio Montes Carrillo, representante de Morena ante el Instituto Electoral y de Participación Ciudadana.
Consultado sobre su opinión sobre el encuentro entre ambos la ex ministra y el mandatario guerrerense, el martes pasado en la Ciudad de México, el morenista dijo que fue una reunión “institucional de un gobierno que tomará protesta en diciembre y que es parte de la coordinación que tiene que haber entre el gobierno que entra con los estados, no le veo nada especial”.
A pesar de que criticó severamente a Félix Salgado, a Adela Román y a Abelina López, por haberse reunido con Astudillo Flores después de ganaron cargos de elección en las elecciones pasadas, Montes Carrillo ahora justificó que Sánchez Cordero se está reuniendo con todos los gobernadores del país y “le tocó al de Guerrero, forma parte del trabajo que se está haciendo y de acercamiento a los gobernadores”.
Dijo que la próxima secretaria de Gobernación les está informando a los mandatarios el objetivo de los delegados en las 32 entidades del país, que ha ocasionado la oposición de alguno de ellos, incluido el de Guerrero, quien abiertamente dijo que no está de acuerdo con esa figura que recaerá en el aún dirigente de Morena en Guerrero, Pablo Amílcar Sandoval Ballesteros.
Aseguró que la oposición de los gobernadores a esa nueva figura administrativa del gobierno federal es porque van a perder el control de programas sociales y de las delegaciones, “que son utilizadas como posiciones políticas de control”, porque en “su lógica, ellos deben tener el dinero, ellos ponen a sus incondicionales, establecen negocios”.
Añadió que a muchos “les encanta hacer negocios con la construcción” y señaló que “tenemos gobernadores, senadores, diputados y alcaldes constructores; sin obras no hay sobras. El temor es que no van a ser gobernadores constructores, por eso su oposición a la figura de los coordinadores estatales”, insistió.
Sergio Montes señaló que con las nuevas coordinaciones “los programas y recursos van a bajar de manera directa a los ciudadanos”, a diferencia de lo que ocurre ahora, que “hay negocios con proyectos productivos del PRD y del PRI”.
Señaló de manera directa al todavía senador Armando Ríos Piter y dijo que “tenemos a un Jaguar que tenía casas de programas sociales en toda la Costa Grande, de proyectos productivos bajaban millones y se llevaban ganancias millonarias”.
También acusó al diputado local con licencia Sebastián de la Rosa Peláez, quien renunció al PRD y respaldó al ahora presidente electo Andrés Manuel López Obrador en la pasada elección, al que llamó “ese señor del mechoncito blanco”, porque “se hizo inmensamente rico de proyectos productivos; saben que eso se acabó y eso es lo que no entienden”.
Por eso aseguró que la futura secretaria de Gobernación “les explicó a los gobernadores que habrá un nuevo esquema de coordinación y de colaboración, una manera diferente de trabajar los programas y proyectos de desarrollo en los estados”.