* Además, hay 152 planteles educativos y 43 iglesias, entre ellas la catedral de Santa Prisca, en Taxco, que sufrieron afectaciones de consideración por el sismo, dijo el gobernador
* Dijo que el presidente Enrique Peña le habló por teléfono y le informó sobre la situación que prevalece en Guerrero, tras el paso del huracán ‘Max’ y el temblor del martes
ALONDRA GARCÍA / JESÚS SAAVEDRA
Cinco muertos, más de mil viviendas afectadas, 152 escuelas dañadas y 43 iglesias colapsadas es el saldo que registra hasta este momento el estado de Guerrero, derivado del terremoto de 7.1 grados Richter ocurrido el 19 de septiembre, informó el gobernador Héctor Astudillo Flores.
La jornada de ayer, el mandatario guerrerense realizó un recorrido por los municipios de Huitzuco y Tepecoacuilco, en la región Norte, donde constató los daños del sismo. Estuvo acompañado por el secretario de Educación, José Luis González de la Vega Otero.
Entrevistado durante la gira de trabajo, el mandatario estatal indicó que en los municipios más afectados se registraron cientos de casas dañadas, en su mayoría de adobe y teja.
Confirmó que el gobierno del estado ya comenzó a censar las viviendas afectadas, para que las familias puedan recibir los apoyos, tan pronto fluyan los recursos por parte de la Federación.
Astudillo Flores indicó que también hay, por lo menos, 43 iglesias afectadas. Entre ellas se encuentra la catedral de Santa Prisca, en Taxco de Alarcón, donde habrá de intervenir el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) para realizar la evaluación del daño y su reconstrucción.
Otra iglesia histórica que presenta daños es la ubicada en la cabecera municipal de Tepecoacuilco, la cual ya fue revisada por el personal del INAH para determinar los daños y dar inicio al proceso administrativo para que sea rehabilitada con recursos federales.
El gobernador guerrerense calificó como “graves” las afectaciones en los municipios de la región Norte, pero reconoció que éstos no alcanzan la magnitud de los daños registrados en el estado de Morelos, Puebla y en la Ciudad de México.
Aseveró que para su gobierno es prioritario resguardar la integridad física de los ciudadanos con la instalación de albergues temporales.
Asimismo, confirmó que este viernes tampoco habrá clases en ninguna de las escuelas de la entidad, para no poner en riesgo ni a los estudiantes ni a los maestros, mientras se continúan con los trabajos de revisión de los planteles para descartar daños estructurales provocados por el temblor.
Antes, en Chilpancingo, durante un evento en Casa Guerrero donde entregó Becas Sociales, Astudillo Flores informó que el presidente Enrique Peña Nieto le habló por teléfono para conocer la situación que prevalecen en Guerrero después del temblor del martes.
Abundó que le informó al presidente “de las afectaciones reales. Me preguntó qué cuáles eran los municipios más afectados y le di el dato de Atenango del Río, le hablé de las casas, de qué tipo de casas, mucha casa de adobe afectadas”.
Precisó que también le informó de los daños que dejó el huracán ‘Max’, la semana pasada. “Eso ya había yo hablado con él por teléfono, él me preguntó que cómo veía el grado de los daños y le dije que por supuesto que había urgencias, pero que también no se comparaba con los daños de Morelos, Puebla y la Ciudad de México”.
Durante el recorrido que realizó ayer por las escuelas de Huitzuco y Tepecoacuilco, Astudillo Flores se comprometió con los presidentes municipales a gestionar los recursos necesarios para apoyar a las familias afectadas e iniciar la reconstrucción y rehabilitación de los planteles educativos dañados.
En Huitzuco visitó la escuela secundaria Manuel Sáenz, donde los directivos del plantel le informaron que los daños estructurales son graves. Ante esta situación, determinaron que los alumnos no regresarán a clases el lunes.
El alcalde de Huitzuco, José Luis Ávila, informó que 24 escuelas resultaron dañadas en ese municipio, así como unas 300 viviendas, 21 locales comerciales de una nave del mercado central y la iglesia central de la cabecera municipal.
Más tarde, el gobernador visitó el municipio de Tepecoacuilco, donde verificó los daños en la escuela secundaria general Francisco González Bocanegra, de la comunidad de San Vicente Palapa, que deberá ser demolida por los graves daños que presenta.
Ahí se decidió que el salón de usos múltiples de la comunidad será habilitado para atender a los estudiantes.
El alcalde de Tepecoacuilco, Julio Alberto Galarza Castro, pidió que se destine un presupuesto específicamente para apoyar con láminas y enseres domésticos a quienes perdieron sus viviendas.
Sigue la suspensión de clases
El titular de la Secretaría de Educación Guerrero (SEG), José Luis González de la Vega Otero, informó que este viernes se suspenderán las clases en todas las escuelas de la entidad, de todos los niveles, tanto públicas como privadas, para garantizar la integridad física de los estudiantes, docentes y administrativos.
En entrevista, indicó que este fin de semana se continuará con la evaluación física de las escuelas, para determinar si fueron dañadas por el temblor de 7.1 grados Richter.
Dicha labor, dijo, servirá como base para determinar qué escuelas pueden regresar a clases el lunes y cuáles no podrán hacerlo debido a los daños estructurales. En esos casos, dijo que se instalarán aulas móviles para que los estudiantes no pierdan clases.