* “Como víctimas no tenemos nada qué hablar con los delincuentes. Yo jamás me voy a sentar a dialogar con quienes decapitaron a mis hermanos, los torturaron, los despedazaron; nosotros, antes que otra cosa, somos víctimas”: José Díaz Navarro, vocero de Siempre Vivos.
Alondra García
La organización Siempre Vivos, que aglutina a familiares de al menos 100 personas desaparecidas en la zona de la llamada Montaña baja, descartó la posibilidad de dialogar y hacer un pacto de paz con la delincuencia.
“Como víctimas no tenemos nada qué hablar con los delincuentes. Yo jamás me voy a sentar a dialogar con quienes decapitaron a mis hermanos, con quienes los torturaron, con quienes los despedazaron, los descuartizaron; nosotros, antes que otra cosa, somos víctimas”, sentenció José Díaz Navarro, vocero de Siempre Vivos.
Díaz Navarro fue entrevistado por varios medios de comunicación antes de reunirse en privado con Michel Forst, relator especial de la ONU, quien vino ayer a Guerrero a informarse in situ sobre la situación de los defensores de derechos humanos.
Informó que en el encuentro entregaría un informe con los casos de 100 personas desaparecidas a causa de la guerra entre grupos antagónicos de la delincuencia organizada que se disputan el llamado “corredor de la muerte” comprendido por los municipios de Tixtla, Chilapa, Atliaca, Apango y Zitlala.
El activista advirtió que en Chilapa se ha recrudecido la violencia y que en la última semana se han registrado siete homicidios tanto en la cabecera municipal como en las localidades cercanas.
Por ello, insistió en que la estrategia implementada por el gobierno estatal “es un fracaso” y exigió que se implemente una diferente.
También denunció que tanto el gobierno del estado como la Fiscalía General les han cerrado la puerta a los familiares de las víctimas.
“No hay voluntad política para avanzar con nosotros, ya ni siquiera tenemos diálogo, por eso nos hemos concentrado más en otras instituciones a nivel federal”, recriminó Díaz Navarro.
Recordó que gracias a la presión ejercida por el colectivo Siempre Vivos se logró el reforzamiento de la seguridad en Chilapa con la presencia de grupos de la Policía Federal. Sin embargo, señaló que estos policías ya se retiraron.
“Estamos insistiendo en que la Policía Federal regrese a Chilapa, pero que cumplan con su trabajo, porque no hay ningún detenido. Todos los delincuentes que nos están asesinando, que están cometiendo violaciones graves a los derechos humanos, siguen libres”, comentó.
Díaz Navarro señaló a Los Rojos y Los Ardillos como los cárteles responsables de la violencia que se vive en los municipios que comprenden la franja entre la zona centro y la Montaña baja.
“Los Ardillos y Los Rojos, los dos son crueles, despiadados, salvajes. Estamos en una situación de barbarie, así que vamos a seguir poniendo ese tema sobre la mesa. Ya le hemos denominado el ‘corredor de la muerte’ a Tixtla, Atliaca, Apango, Chilapa y Zitlala”, expuso.
El vocero de Siempre Vivos recordó que como colectivo trataron de que el Senado aprobara un punto de acuerdo para declarar a estos municipios como una zona de emergencia humanitaria, debido a la guerra entre los cárteles de la droga y el gobierno. Sin embargo, la propuesta no procedió.
José Díaz Navarro advirtió que en la búsqueda de sus familiares desaparecidos y asesinados, ha recibido “amenazas de muerte, órdenes de ejecución” y recriminó que ninguna autoridad lo ha apoyado en esto.
La causa, dijo, es la colusión que existe entre las autoridades, los empresarios y la delincuencia organizada.
“Hay narcos, hay políticos y hay empresarios, pero cuando estos tres elementos se conjugan en una sola persona surge esta situación. Ahí tenemos a estos narco/delincuentes/empresarios, aquí los tenemos en Guerrero. Están en oficinas de gobierno, están en el Congreso, están en los ayuntamientos, son los principales lobos que están terminando con las familias y esta situación es porque altos mandos del estado están involucrados con la delincuencia, tienen amplios nexos, hay complicidad, hay protección a los delincuentes, por eso tenemos esta situación tan grave”, aseveró Díaz Navarro.