* A medio hacer y abandonados, lucen los trabajos de edificación de aulas para una primaria, una Telesecundaria y un jardín de niños en Coapanguito

 

FERNANDO HERNÁNDEZ

 

COAPANGUITO.— Desde hace un año, constructoras contratadas por el Instituto Nacional de Infraestructura Física Educativa (INIFED) y a través del Programa de Escuelas de Calidad (PEC), que depende de la Secretaría de Educación Guerrero, dejaron inconclusas diversas obras en el anexo ejidal de Coapanguito, perteneciente a la comunidad de San Vicente.

Durante un recorrido por el lugar destinado por los comuneros para la reubicación de los habitantes del poblado de San Vicente, que fue declarado como inhabitable por el Consejo Nacional para la Atención a Desastres Naturales (Cenapred) y la Secretaría de Protección Civil, tras el paso de la tormenta ‘Manuel’ y el huracán ‘Ingrid’; se observó el abandono de la construcción de lo que sería una escuela primaria, las aulas para reubicar la telesecundaria de la comunidad, así como el jardín de niños y una plaza cívica.

La directora de la Escuela Telesecundaria Juan Álvarez de la comunidad de San Vicente, Romanita Ramos Mondragón, denunció que desde mayo del 2015 las constructoras abandonaron las obras de construcción del complejo educativo que se desarrollaban en el ejido de Coapanguito.

Indicó que el INIFED, con recursos del Fonden, debía construir dos aulas para la Telesecundaria, pero esos espacios jamás fueron entregadas de manera formal al plantel.

También dijo que para la construcción de las aulas se destinaron alrededor de 3 millones de pesos, pero su ejercicio no fue informado a los comités de Contraloría municipal ni a la Comisaría Municipal.

Aseguro que en la zona, ubicado a unos cinco kilómetros de San Vicente, han llegado a desarrollar trabajos por lo menos tres empresas constructoras, pero ninguna ha terminado las obras.

En el lugar se observan las obras inconclusas, en particular la que tiene que ver con la construcción de la plaza cívica, en la que sólo se dejó a medio terminar una plataforma de concreto que luce dañada por la filtración de agua que han socavado la estructura de concreto.

Además se observan varillas de acero unidas en la tierra en lo que se entiende está planificado para convertirse en las estructuras de cimentación de plataformas.

En los alrededores del aula de la primaria y los dos salones de la Telesecundaria, hay material de construcción abandonado, similar al poliestireno expandido, conocido como unicel, moldes para ser rellenados con concreto, madera y acero.

La profesora Ramos Mondragón aseguró que las instalaciones de la Telesecundaria, en la que todavía toman clases 162 adolescentes, están en condiciones “deplorables” para que los alumnos puedan recibir su enseñanza.

La escuela todavía permanece en un terreno de San Vicente que fue rellenado con escombro, pero que constantemente presenta hundimientos.

Recordó que una de las principales carencias de la escuela es que sólo tiene dos sanitarios para los 162 estudiantes, y unos cinco docentes que laboran en la institución.

Ante la falta de apoyo por parte de las autoridades federales y de la Secretaría de Educación Guerrero (SEG), los padres de familia tuvieron que construir por cuenta propia dos aulas de madera, porque los salones de concreto de la escuela presentan cuarteaduras.

Ramos Mondragón precisó que las autoridades educativas justifican la negativa de dar apoyo a la Telesecundaria porque los recursos para la escuela están considerados en las obras con las que serán reubicadas las instalaciones en el ejido de Coapanguito, pero que ya fueron abandonadas por las constructoras desde mayo del 2015.