* No hay más ruta que los despidos de mil 280 trabajadores del magisterio, ya que ni siquiera el secretario de Educación puede ‘torcer’ la ley, afirmó el delegado en Guerrero de la Secretaría

 

GILBERTO GUZMÁN

 

Sólo 30 profesores justificaron su inasistencia a la Evaluación del Desempeño Docente convocada por la Secretaría de Educación Pública (SEP), informó Abraham Ponce Guadarrama, delegado en Guerrero de la Secretaría de Educación Pública (SEP).

Señaló que el tiempo para que los trabajadores que no se presentaron a la Evaluación del Desempeño Docente justificaran su inasistencia ya feneció, por lo que no hubo la respuesta que las autoridades esperaban.

Recordó que fueron mil 310 los mentores que no se presentaron a evaluarse, pero sólo 30 presentaron un justificante, razón por la que el dato se quedó en mil 280 docentes que no se evaluaron y que serán despedidos en el transcurso del mes de junio, según anticipó el secretario de Educación en el estado, José Luis González de la Vega.

Ponce Guadarrama reconoció que la cantidad de casos de inasistencia justificados es muy pequeña, que lo ideal sería que fueran más para que el trance de los despidos no resultara tan doloroso, sin embargo, destacó que no hay más ruta que aplicar la ley.

El funcionario reconoció que las movilizaciones que hasta el momento ha realizado la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación de Guerrero (CETEG) han sido pacíficas, pues en ellas no se han generado enfrentamientos ni bloqueos a la Autopista del Sol.

Por esa razón, dijo que las instancias encargadas de regular al sistema educativo están realizando un análisis permanente del curso que lleva el movimiento.

Dijo que lo deseable es que hubiera un diálogo sobre la Reforma Educativa y la Evaluación Docente, sin embargo, destacó que hay en los mentores militantes de la CETEG una posición que no se quiere flexibilizar.

Destacó que la Reforma Educativa pasó por todo un proceso legislativo que le da legitimidad, ya que la aprobaron el Congreso de la Unión y todos los Congresos de los estados, de tal suerte que “ni siquiera el secretario de Educación la puede torcer, solamente se debe cumplir”.