La Reforma Educativa se aplicará hasta sus últimas consecuencias: Nuño.— El aumento a los maestros retroactivo al 1 de febrero: SNTE.— Mario Moreno Arcos representa la seguridad de la fuerza priista

 

Enrique Vargas

 

La CNTE y la CETEG en Guerrero deben considerar muy bien su situación, ya que sus contingentes se han reducido a su mínima expresión, porque la mayoría ya se dieron cuenta que la Reforma Educativa se aplicará en toda su extensión y quienes se marginen con sus actitudes contestatarias, quedarán efectivamente marginados del sistema educativo nacional o estatal, que no sufrirán daño, porque hay 26 mil nuevos maestros que están esperando la oportunidad de ingresar al servicio.

El titular de la SEP, Aurelio Nuño Mayer, reunió la información de los faltistas en los cuatro estados donde la CNTE tiene presencia y resulta que sólo una muy limitada minoría fu la que secundó el paro de actividades.

En Oaxaca, el estado que era más radical hasta que les quitaron la fuente de los recursos, un 93 de maestros están trabajando; Chiapas, que ahora es la más radical tiene a 83 por ciento de los maestros trabajando, le sigue Michoacán, con 92 por ciento, y Guerrero ya es el más trabajador, pues 99.8 por ciento de los profesores están en sus aulas, con sus alumnos, porque la CETEG apenas pudo jalar a 0.2 por ciento de los maestros guerrerenses que se fueron al paro.

De esta manera, se supone que están en paro en los cuatro estados señalados un total de 24 mil docentes, que recibirán los descuentos de los días que falten y podrán ser despedidos del servicio, para que den lugar a los muchos que esperan un lugar.

MARIO MORENO ARCOS REPRESENTA LA SEGURIDAD DE LA FUERZA PRIISTA.— Una vez que pasen las elecciones del próximo 5 de junio, muchas cosas habrán de definirse a nivel nacional y estatal, porque los resultados que arrojen los votos que depositarán millones de mexicanos, habrán de influir en las políticas y las definiciones que se tomen en diversos aspectos  de la vida nacional.

En Guerrero no habrá elección, pero será influido por los resultados que se esperan, porque habrán de definir la urgencia de contar con una buena estructura del priismo estatal, para prepararse y enfrentar el cambio local que se dará dentro de dos años.

En la dirigencia estatal del PRI, que en diversas ocasiones se indicó sería para Mario Moreno Arcos, debe cumplirse de esa manera si se quieren tener los mejores resultados en la elección venidera, además de que es necesario trabajar a fondo la estructura y organización de su partido.

Sin embargo, no hay apresuramiento de ningún tipo en quien ocupó en dos ocasiones la Presidencia Municipal de Chilpancingo, dos veces la diputación federal y otra en la diputación local, quien espera con tranquilidad y sin preocupación la decisión que el CEN del PRI tome de común acuerdo con el gobernador Héctor Astudillo Flores.

No hay otro político en el estado con la experiencia, la trayectoria y la capacidad para construir escenarios de triunfo en la política estatal, pues a pesar de que ahora se le mantiene en la banca, siempre está dispuesto a salir a ayudar a la gente cuando se presentan contingencias naturales, como el fuerte aguacero de hace 10 días, cuando llevó ayuda a varias comunidades que resultaron afectadas y lo mismo hizo con los menores de edad con motivo del Día del Niño o con las mujeres de las colonias y comunidades, en el Día de la Madre.

Cuenta con el respaldo y el trabajo de su hermano Ricardo Moreno Arcos, actual diputado local, quien ha logrado levantar también un importante respaldo popular en la capital de Guerrero, en unidad con su hermano mayor, que tiene la confianza de los capitalinos, de sus comunidades, de los demás municipios de la región Centro y de otros lugares en el estado, que también he recorrido siempre en busca de ayudar a la gente y sus necesidades.

Está claro que es el político estatal que mantiene una buena y cercana relación, tanto con el presidente Enrique Peña Nieto, como con sus secretarios Miguel Osorio Chong, de Gobernación, y Luis Videgaray, de Hacienda.

Se ha visto con claridad que Mario Moreno es un factor determinante en la región Centro del estado, pues después del gobernador Héctor Astudillo, es quien tiene la fuerza y la capacidad para hacer ganar a los candidatos de su partido en las posiciones locales y hasta en las federales.

A él se debe en gran medida que Chilpancingo capital se haya mantenido hasta ahora fiel a los candidatos priistas, pues hasta ahora no ha habido candidato de oposición que haya podido ganar la Presidencia Municipal, que generalmente han sido superados por un amplio margen, por lo que es una garantía permanente de triunfo del partido tricolor en esta región, pero también en otras, porque su presencia y aceptación se ha ampliado a otras regiones, como en la Norte, Tierra Caliente y Acapulco, principalmente.

Mario Moreno está en la mejor disposición para entrar a la dirigencia del PRI estatal en cuanto se tome la decisión correspondiente, pero no está desesperado por lograr esa posición, aunque seguirá trabajando por su partido desde el lugar donde se encuentre, sea dentro o fuera de la estructura política estatal.

En ningún momento ha considerado la posibilidad de emigrar del PRI si, por alguna razón o resentimiento, no se le permite integrarse a la estructura de su partido en el estado, pues asegura que trabajará por su partido como un priista más, sin puesto oficial, para que el priismo nacional tenga en Guerrero una buena respuesta en la elección federal y estatal de 2018, cuando habrá de cambiar la Presidencia de la República y en el estado se votará por los presidentes municipales, los diputados locales, los federales y los senadores.

Mario Moreno será un factor de fuerza y de amplia presencia en ese proceso electoral, ya sea que se decida darle una buena responsabilidad o que lo dejen fuera de los puestos, porque su fuerza personal es real y su influencia social representa un importante respaldo para los candidatos de su partido, el PRI.

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