* Este domingo, la Casa de Justicia “La Patria es Primero” conmemoró su segundo aniversario de creación

 

GILBERTO GUZMÁN

 

TIXTLA.— Integrantes de la Policía Comunitaria de Tixtla, pertenecientes a la Casa de Justicia “La Patria es Primero”, denunciaron que policías preventivos de dicha localidad trabajan de la mano con el crimen organizado, por lo cual temen una incursión armada en la base de El Fortín.

En una conferencia con motivo a su segundo aniversario de creación, auspiciada por la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias (CRAC), la comandante ‘Tori’ afirmó que en Tixtla, la inseguridad atraviesa por un momento muy delicado, ya que en los últimos días se han registrado varias ejecuciones, ‘levantones’ y actos de extorsión contra integrantes del sector productivo del municipio.

Además, decenas de policías comunitarios realizaron una marcha que comenzó en el barrio de El Santuario y culminó en el tradicional barrio El Fortín.

En ese lugar se realizó un congreso estatal con la participación de las organizaciones que forman parte del Movimiento Popular Guerrerense (MPG), que se creó hace tres años en el contexto de la lucha del magisterio disidente contra la Reforma Educativa.

La comandante ‘Tori’, de la CRAC, aseguró que en los últimos meses en Tixtla se instaló un ambiente de terror y miedo, principalmente por la operación tolerada en el municipio de grupos del crimen organizado, que “está auspiciado por el Estado mexicano”, acusó.

Como prueba de sus dichos, señaló que la delincuencia se desplaza de manera impune en Tixtla pese a la instalación de retenes por parte de las policías municipal y la estatal.

Como ejemplo, recordó que antes de la ejecución de cuatro integrantes de la comunitaria, el 26 de noviembre de 2015, los retenes de la policía del estado se retiraron para no tener que responder ante el ataque que se registró en la entrada del barrio El Fortín.

“Nosotros nos hemos percatado que siguen entrando los grupos de la delincuencia organizada, curiosamente a pesar de que haya retenes, pareciera que hubiera entre cuerpos policíacos y la delincuencia organizada cierta coordinación”.

Denunció que hace pocos días, a Tixtla entraron grupos de civiles armados durante la madrugada, y los municipales se acuartelaron para no tener que enfrentarlos.

“Nosotros estábamos previendo que ingresarían aquí a nuestra sede (en el barrio de El Fortín), pero de todos modos seguiremos trabajando en defensa de nuestro pueblo”.

Dijo que gracias a que la CRAC tiene simpatizantes en todo el municipio se dan cuenta de las anomalías de la Policía Municipal y la tolerancia hacia el crimen organizado:

“Hemos recibido amenazas, y tememos que en algún momento pudieran entrar, pensaron que con el asesinato de nuestros compañeros nos íbamos a desintegrar, pero eso no sucedió y están molestos”, concluyó.