Isidro Bautista

 

El periódico El Universal publicó en su edición de ayer una nota con el encabezado “Video exhibe presunto nexo de padres de 43 con el narco”, la cual algunos diarios de Guerrero la reprodujeron, por su circulación en las redes sociales.

El asunto debe investigarse o aclararse ante el desaseo en que de por sí cada vez más cae ante la opinión pública el caso de los hechos ocurridos a los normalistas de Ayotzinapa en la ciudad de Iguala, a tal extremo que hoy ya no se cree en lo que dicen todas las partes, por sus dimes y diretes que no parecen tener fin.

En realidad, por la parte de Ayotzinapa nadie ha desmentido el contenido de la conversación telefónica ventilada con el video filtrado, en el que aparecen supuesta o presuntamente su abogado Vidulfo Rosales Sierra y Mario César González Contreras, a quien ahí se ubica como uno de los padres de los 43 estudiantes desaparecidos.

El litigante indicó que “la filtración de la llamada, obtenida mediante una intervención ilegal a sus teléfonos, ocurre en un contexto de descalificaciones muy acentuadas contra estudiantes, defensores, el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) y ahora directamente contra los padres de los desaparecidos” (El Sur, edición 06/04/16).

Pero añade: “Se aprovechan de esta conversación para deslegitimar la lucha por la presentación de los 43 alumnos desaparecidos, para aislarlos de la simpatía que tiene el movimiento a nivel nacional y generar una división interna”.

Si se observa detenidamente el contenido de dicha conversación se notará que no se desmiente el supuesto o presunto hecho de haber recibido los 200 mil pesos aludidos:

–MG: Pues me amenazaron Los Guerreros Unidos.

–VR: ¿Quién?, ¿los Guerreros Unidos?

–MG: Ajá.

–VR: ¿Qué le dijeron?

–MG: Que entreguemos el puto dinero. Yo le dije que qué tengo que ver con eso. (Le respondieron:) tampoco te pongas pendejo, hijo de la chingada. Ya te dije que le digas a esa mierda y a los otros putos que se juntan con él que le den el dinero que les entreguen el puto dinero, o los voy a levantar.

–VR: ¿Pero así le dijeron? ¿que le dieran el dinero? ¿así le dijeron?

–MG: Que les repartiera, que les entregara a los padres los 200 mil pesos, que yo también y yo por qué, le digo, si he sido el único que ha sido derecho con los padres. Me dice: nosotros agarramos parejo, güey, y de una vez te decimos: si no entregan ese puto dinero ya valieron.

Este mismo martes, en la mañana, en conferencia de prensa, Mario González se deslindó de los grupos criminales.

Ahora resulta que el sindicato de trabajadores del INAH, de la Ciudad de México, aportó 200 mil pesos como donativo al movimiento emprendido a favor de Ayotzinapa.

Desde un principio había circulado la versión de que el grupo de Los Rojos infiltró a algunos de sus miembros entre los estudiantes atacados y desaparecidos en aquella localidad, después de haber dado dinero, entre otros, al entonces director de su normal, para disputar la plaza de Iguala con la banda de Guerreros Unidos.

El asunto debe ser aclarado legalmente para no opacar más la investigación de lo ocurrido en septiembre de 2014, que ante la sociedad en general parece estar hasta prostituido.

Ojalá que las versiones filtradas en el referido video resulten falsas para que no manchen la imagen de las víctimas y los dolientes de una tragedia que ya no debe repetirse.

Así como se lucha por encontrar la verdad de lo sucedido en Iguala debe pugnarse por esclarecerlas, con las consecuencias que pueda implicar.

Es condenable el hecho de haber grabado esa conversación telefónica, cierto, pero peor lo sería si resultase cierta.

Los padres de los normalistas desaparecidos merecen saber la verdad de lo ocurrido a sus hijos, y la sociedad también. isidro_bautista@hotmail.com