* Vidulfo Rosales, activista de esa ONG, dijo que tras el informe sobre el tercer peritaje en el basurero de Cocula, las relaciones de familiares de los desaparecidos con el gobierno federal están a punto del “rompimiento”

 

* El activista advirtió que “estaríamos regresando el movimiento de los padres y los estudiantes a las calles”

 

REDACCIÓN

 

TIXTLA.— Luego de las diferencias entre el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) con la Procuraduría General de la República, debido a los resultados del tercer peritaje en el basurero de Cocula, el rompimiento entre los padres de los 43 estudiantes desaparecidos de Ayotzinapa y el gobierno federal es inminente, señaló el abogado de Tlachinollan, Vidulfo Rosales Sierra.

En declaraciones que hizo a la agencia API, el activista advirtió que, debido al informe presentado por un grupo de 6 especialistas en comportamiento del fuego, en el que se concluye que en el basurero de Cocula sí hubo una pira controlada de gran magnitud y que en ese lugar se incineraron a al menos 17 personas, las relaciones entre los padres de los 43 desaparecidos y de los estudiantes de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa con el gobierno de Enrique Peña Nieto se ubicaron “en un punto en el que un rompimiento es inminente con el Gobierno Federal”.

Consideró que “esto nos llevaría a una polarización” de la situación, por lo que no descartó que “estaríamos regresando el movimiento de los padres y los estudiantes a las calles, no habría otra opción ahí”.

Rosales Sierra —quien más que ser el abogado de los padres, es el estratega de quienes se han montado en la tragedia de Iguala—, dijo que en los próximos días se analizarán las acciones a emprender y que no se descarta, de ninguna manera, el estallido de nuevas movilizaciones de protesta en las calles de las principales ciudades de Guerrero.

“Lo que vemos es que hay un manejo inadecuado, un manejo turbio  que se está haciendo de este documento, que no se respetaron los acuerdos que se tenían con el GIEI, de cómo se iba a manejar la información, tanto para los padres, como la información pública”, dijo.

Acusó a la PGR de hacer uso político, más que científico, de los resultados del tercer peritaje hecho por los especialistas John DeeHaan, Frederick Mowrer, James Quintiere, Ricardo Torres, José Torero y Mario Saldaña, y advirtió se trata de un informe preliminar, por lo que el hecho de que la PGR hubiera decidido hacerlos públicos tiene la intención de generar confusión y utilizarlos como un instrumento político.

Rosales Sierra aseguró que “para nosotros no está aportando nada nuevo este documento, nos está aportando datos que en anteriores peritajes, por ejemplo en el peritaje del equipo de Expertos Argentinos de Antropología Forense (EAAF), son más claros estos elementos”.

Reiteró el argumento de que en el basurero de Cocula ha habido incendios, no solo en septiembre de 2014, sino desde mucho antes, y recordó que el dictamen sólo señala que hallaron restos humanos de adultos, pero no precisa la fecha en que fueron incinerados ni los identifica como los de los 43 normalistas desaparecidos.

“Este peritaje nos dice que hubo un fuego controlado de grandes dimensiones, pero no dice cuándo y en qué fecha se llevó a cabo este fuego; porque fuego en el basurero de Cocula ha habido en diferentes momentos del 2014, entonces hay una ambigüedad que nos deja más confusos”, señaló.

Dijo que en el caso de los restos óseos hallados, el informe tampoco explica o comprueba en qué fecha fueron hallados o a quien pertenecen, situación que ya había delineado el Equipo de Antropólogos Argentinos Forenses.

Insistió en que el nuevo estudio presentado por la PGR fue realizado por un equipo de expertos sobre el fuego, sólo para determinar si hubo o no un incendio de las magnitudes que planteó Murillo Karam en lo que llamó “verdad histórica”, pero no son un equipo para determinar la genética de los restos óseos hallados. “Ellos no tienen atribuciones, ni la pericia necesaria para analizar restos óseos, eso es propio de los genetistas”. (Con información de API)