No hubo planificación
Por Chanssonier
A diferencia de otras ciudades de la república, cuyo desarrollo urbano fue proyectado, el crecimiento de Chilpancingo ha sido irregular, estableciéndose colonias en lugares de alto riesgo, con calles estrechas que por lo mismo, no admiten una urbanización adecuada. Cuando se inició la explosión demográfica las autoridades, lejos de ordenar su vertiginoso desarrollo, dejaron que cada quien se estableciera en donde mejor le pareció, trayendo como consecuencia que tierras dedicadas para tareas agrícolas, se convirtieran en colonias o fraccionamientos.
Se conoce parte del pasado de la población, porque se debe a historiadores, quienes registraron los acontecimientos históricos más relevantes, como fueron los casos del Primer Congreso de Anáhuac, la declaración de independencia, o bien el traslado de Tixtla a este lugar los poderes estatales, entre otros.
Hasta hace poco tiempo el ayuntamiento designó un cronista; quienes lo han sido no han dejado huella de su trabajo, dando a conocer lo que ya es conocido; esto es se llueve sobre mojado. Hasta poco antes de la primera mitad del siglo XX, se contaba con sitios históricos, como la casa en donde nació el general Nicolás Bravo, o la casona en donde el cura Morelos presidió las sesiones del congreso de Anáhuac; ambos edificios fueron víctima de la piqueta que acabó con ellos. En el caso del congreso había numerosos terrenos en donde el gobierno pudo levantar una escuela, conservándose el histórico edificio docente.
El crecimiento de la ciudad se inició en el curso del gobierno de Leyva Mancilla; fue la colonia Cuauhtémoc Norte la primera en surgir. Enseguida empezaron a nacer muchas más, la mayor parte de ellas al margen de la ley; de tal manera los tradicionales barrios de San Mateo, Santa Cruz, San Antonio y San Francisco, así como su anexo Tequicorral, rompieron sus antiguos linderos. Más adelante nacerían numerosos asentamientos al otro lado del río Huacapa, hasta entonces una corriente de agua que había detenido el desarrollo citadino.
Hoy como ayer la ciudad continúa su crecimiento desordenado, por lo cual se mira difícil la construcción de anchas avenidas, puentes aéreos y otras obras, que destacarían su evidente progreso.
Mártires del 2 de mayo
Hasta el año de 1953 la que ahora conocemos con el nombre de avenida Alemán, llevó el de Mártires del 2 de mayo, en recuerdo de la lucha armada entre vecinos y tropas zapatistas, que en 1918 pretendieron escarmentar a la población, responsabilizándola de la detención del gobernador general Silvestre G. Mariscal, mandado encarcelar por el presidente Venustiano Carranza, por los múltiples atropellos sucedidos, durante su cuestionable administración.
En esta lucha fue apoyada por toda la población, distinguiéndose por su valentía la joven Felicitas Ruiz, quien empuñando una carabina, se enfrentó a los que pretendieron escarmentar a los habitantes, quienes llevando a la cabeza al alcalde don Francisco de Célis, lucharon con bravía hasta derrotar a su enemigo.
Esta calle era muy angosta, siendo difícil que dos autos en direcciones opuestas, pudieran transitar libremente, siendo por esto que el gobernador Alejandro Gómez Maganda, dispuso se ampliara en su totalidad, poniéndole el apellido del presidente Miguel Alemán; estos trabajos trajeron consigo nuevas construcciones domiciliarias, acabando con los techos de teja. Además fue por muchos años vía de salida al Puerto de Acapulco.