* Las bodas entre personas del mismo sexo son legales; podrán ampararse las parejas si se niegan a casarlos: Huerta Pegueros

 

Luis Jijón

 

La falta de trabajo y las situaciones adversas en las que se encuentra la entidad, son algunos de los factores para que las parejas decidan divorciarse y el 2015 fue el año en que más disoluciones se han solicitado en los últimos años, con un total de mil 949  y en los primeros 40 días del 2016 se han divorciado 300 parejas, informó, María Inés Hurta Pegueros, coordinadora Técnica del Registro Civil en el estado.

Dichos divorcios son atribuibles a la problemática que están enfrentando las parejas, “están muy angustiadas, no tienen trabajo, empiezan los conflictos al interior de su hogar, sobre todo por la falta de comprensión y de mucho amor, porque cuando uno se ama en situaciones difíciles permanecen unidos”, expresó.

Las situaciones adversas por las que atraviesa la entidad también son “factores importantes y decisivos para que las parejas decidan en un momento dado acudir a los juzgados” y en 15 días queda disuelto el vínculo matrimonial.

En el tema de las bodas entre personas del mismo sexo y tras la polémica que se registrara, tras realizar una boda masiva en el puerto de Acapulco, lo que generó que varios funcionarios e incluso legisladores manifestaran que dicho evento era ilegal, pues en Guerrero aún no se legislaba en el tema, Huerto reiteró que las bodas igualitarias son legales, tras la aprobación de la Suprema Corte de la Nación, quien “tiene la última palabra en este país y no hay vuelta atrás, todos los que quieran decir que no es válido será bajo su propia responsabilidad, porque realmente creemos que en el Estado mexicano se respetan los derechos humanos…que no hay discriminación y que las leyes son acatadas”.

Manifestó que hay funcionarios de los tres niveles de gobierno e incluso legisladores, “que simplemente tienen una idea equivocada y además están negado el derecho que tienen las personas y que está plasmado en la Constitución política. Es increíble como pueden ser legisladores y estar hablando de que no deben de celebrarse (las bodas entre personas del mismo sexo)”, lamentó.

Y de encontrarse una resistencia de los jueces a casarlos, pueden interponer un amparo y mediante le fallo los obligarán y hasta el momento hay cuatro parejas quienes recurrieron a dicho proceso, al ver lesionados sus derechos al negársele el matrimonio.

Reitero que los 20 matrimonios igualitarios que se realizaron el año pasado en el puerto de Acapulco tienen el mismo valor que cualquier otro. (Notymás)