Temas cotidianos

 

FÉLIX J. LÓPEZ ROMERO

 

Regatean los recursos

 

Aun cuando el crimen organizado y el que no lo está, continuará siendo una amenaza para la población guerrerense, si el gobierno federal le continúa regateando recursos económicos, para hacer frente a la violencia que cada día se extiende más, sin poderle dar el combate puntual para su combate.

Actualmente los asesinatos y los secuestros, son cosas comunes en diversas regiones que viven entre la angustia y la incertidumbre, sin que los diversos cuerpos policíacos existentes, puedan darle una batalla para su erradicación.

Posiblemente porque todo lo quieren resolver desde cómo dos sillones, la secretaría de Gobernación destinó apenas 117 millones de pesos, los que se investirán de manera preferente en municipios que guardan una grave inseguridad, como son los casos de Acapulco, Chilpancingo, Tlapa, Iguala y Zihuatanejo de manera preferente, como si el resto de los 81 municipios estuvieran al margen de la delincuencia.

De manera específica al ayuntamiento de Chilpancingo se le entregarán poco menos de 16 millones de pesos, cantidad raquítica ante el aumento de la violencia, la que día con día cobra su cuota de sangre, o bien son privadas de su libertad varias personas, para que sus familiares paguen lo que determinen sus plagiarios.

Se habla de estrategias oficiales que disminuyan los delitos, pero es el caso que van en aumento sin poderles ofrecer, una batalla que disminuya drásticamente su realización.

Mientras las acciones oficiales no se coordinen, mediante un mando único como es la propuesta oficial, la que no puede concretarse por opiniones encontradas en el combate a la violencia, ésta continuará campeando en toda la geografía estatal.

 

Agua, sin solución

 

En el reciente período del gobierno municipal, el que encabezó el priísta Mario Moreno Arcos, se repitió hasta el cansancio que la falta de agua potable en la ciudad, quedaría resuelto porque se contaba con el dinero para tenerla de manera permanente en los hogares. El anuncio fue simplemente eso, porque se ha continuado con la escasez, lo que ha motivado que vecinos de diferentes colonias y el centro citadino, salgan de manera constante a bloquear calles, para contar con ella en sus hogares.

Los tres pequeños sistemas que dotan de agua a la capital, han visto con el correr de los años disminuir su entrega; por otra parte su acelerado crecimiento hace que el problema se vuelva angustioso, porque se desconoce el paradero del dinero para un buen abasto, o fue simplemente una declaración mediante la cual, se habló de traer más agua, sin tener el dinero disponible para tal fin.

Es bien conocido que el sistema de Omiltemi, el más antiguo surtidor de la población, ha disminuido la entrega del líquido elemento, al igual que el de Acahuizotla y el de Mochitlán.

Mientras no se ponga la atención debida en el renglón, las protestas públicas se harán más ruidosas. Las gentes están cansadas de promesas que no se cumplen; por lo tal no constituiría ninguna sorpresa, se continúe con el bloqueo de calles y avenidas, como medida de presión para contar con el servicio de agua, que como los demás que presta el ayuntamiento dejan mucho que desear.

 

Orden en el transporte

 

Se viene haciendo una necesidad impostergable, que las autoridades que manejan el transporte, ejerzan sus funciones de manera responsable, porque desde hace algún tiempo han aparecido organizaciones en este ramo, son la vista de todos quienes manejan en renglón, dejando al margen a la dependencia que debe manejarlo. Esa tolerancia lo único que ha producido, es que los permisionarios y choferes se peleen entre sí, habiendo quemado algunas Urvans, inclusive en la plaza cívica para dar a conocer su fuerza, ante la pasividad de las autoridades que solo miran lo que ocurre, sin atreverse a poner orden cuál es su obligación.

La autollamada Coordinadora Estatal de Transportistas Independientes de Guerrero (CETEG), cuya presencia solo se advierte en esta ciudad, es liderada por Juan Mendoza Tapia, quien ha estado encarcelado por la forma violenta de actuar, siendo inexplicable su libertad, porque le han comprobados los delitos cometidos; además su agrupación carece de reconocimiento oficial, actuando por lo tanto al margen de la ley.

Este mismo caso es el del Frente Unido por la Seguridad y el Desarrollo del Estado de Guerrero (FUSDEG), grupo comunitario encabezado por Crescenciano Ramírez López, quien se ha dedicado a detener a quien se cruza en su camino, exigiéndoles determinadas cantidades de dinero para el logro de su libertad.

Si en realidad el gobierno está interesado en poner paz, en este suelo que ahora parece ser tierra de nadie, tiene la obligación de poner tras las rejas, a quienes se ostentan como dirigentes gremiales sin que lo sean, porque sus acciones al margen de la ley así deben determinarlo.

 

Vecinos se armarán

 

Seguramente vecinos que habitan en colonias populares, están hasta el gorro de delitos cometidos por rufianes, que determinaron armarse en virtud que la policía urbana, ha sido incapaz de restablecer la calma; por lo tanto quienes habitan en los asentamientos humanos denominados Telumbre, San Rafael Oriente, Milenio, Anáhuac, La Ciénega, El Guaje y algunas otras, tomaron esa decisión sobre todo por las noches, a efecto de realizar rondines, amagando con linchar a quienes sorprendan cometiendo ilícitos.

Lo que se pretende llevar a cabo ese ilícito; porque si en realidad se sienten inseguros, deben de recurrir a la policía municipal u otros órganos, que tiene como finalidad el combate a la delincuencia.

Justamente alarmados por el clima de intranquilidad que viven, deben denunciar ante las autoridades a quienes ahora los tienen viviendo en permanente zozobra. Hacerse justicia por mano propia no solucionará el renglón de la inseguridad, porque quien lo haga se estará colocando al margen de la ley.

Precisamente para que estas cosas no lleguen a ocurrir, el gobierno en sus tres niveles busca establecer el Mando Único Policíaco, para que un solo organismo se haga responsable del combate a la delincuencia. La función preventiva del cuerpo a integrarse, se acaba de mirar en la región de la Tierra Caliente, en donde miembros de la delincuencia organizada, pusieron en libertad a gentes que habían secuestrado.

Armarse el vecindario para detener y linchar a transgresores de la ley, no es lo más recomendable; lo sería si los delincuentes enseguida de su aprehensión, son presentados ante las autoridades judiciales.