* Daniel Pano, secretario técnico del Consejo Estatal de Seguridad, reveló que de los 3 mil 500 elementos que ya fueron evaluados, el 16% no pasaron exámenes de control y confianza

 

Redacción

 

Una de las primeras acciones que deberán tomarse para establecer el Mando Único Policiaco en Guerrero, será la liquidación de unos 600 elementos de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado que no aprobaron los exámenes de control y confianza, advirtió el secretario técnico del Consejo Estatal de Seguridad, Daniel Pano Cruz.

En declaraciones hechas a la agencia API después de participar en una reunión del gobernador Héctor Astudillo Flores con los miembros de su gabinete –en la que el mandatario instruyó al secretario de Seguridad Pública, Pedro Almazán Cervantes, hacer lo necesario para que en un lapso de seis meses se establezca ese esquema de seguridad en el estado—, el funcionario estatal explicó que el gobierno enfrenta un serio problema para establecer este nuevo modelo, porque  además de que no hay suficientes policías, de los 3 mil 500 que ya fueron evaluados, el 16 por ciento no aprobaron los exámenes de control y confianza.

Este 16 por ciento serían alrededor de 600 elementos policiacos que deberán ser dados de baja de manera inmediata, mientras que otro 18 por ciento que no aprobó tienen una segunda oportunidad para adquirir habilidades, destrezas y conocimientos, añadió Pano Cruz.

Sin embargo, el funcionario explicó que el problema al que se enfrenta el Gobierno de Guerrero es que no cuentan con los recursos necesarios para liquidar a los policías que serán dados de baja, pues de acuerdo a la Ley Federal del Trabajo deben respetarse sus derechos laborales, entre ellos su antigüedad.

“Habrá que ver su antigüedad, conocer su categoría”, dijo Pano Cruz, quien insistió en que “es un tema actuarial que requiere recursos”.

Explicó que “en el examen de control y confianza se evalúan los aspectos de honorabilidad, toxicología, psicología, salud, aspectos socio-económicos, que constituyen la integridad del servidor público”, y que una vez acreditado este control, “los elementos en activo son sometidos a un proceso de capacitación para la adquisición de conocimientos y habilidades requeridos para el nuevo Sistema de Justicia Penal Acusatorio”.

Añadió que “el segundo control es para medir, conocimientos, destrezas y habilidades de los elementos policiacos, lo cual si no es aprobado en una primera etapa, pueden permanecer en el servicio y ser evaluados en una segunda oportunidad, y en caso de no aprobar también serían dados de baja”.

Pano Cruz destacó que la importancia de culminar con el proceso de evaluación de los elementos de la Fuerza Estatal, es que para el mes de junio deberá implementarse también en Guerrero, el nuevo Sistema de Justicia Penal Acusatorio, donde la Policía Estatal será un elemento importante en la cadena de custodia.

“Esto significa que el policía se convierte en el primer eslabón de Justicia Penal en la entidad, lo cual nos obliga a trabajar intensamente para que el 30 de mayo tengamos evaluados y capacitados a cerca de 11 mil elementos policías” explicó.

El funcionario explicó a API que para establecer de manera definitiva el Mando Único están trabajando a contrarreloj, por las situaciones que se están dando en otros estados, como Morelos, donde tuvo que hacer por decreto, aunque consideró que en Guerrero los 81 municipios están en la disposición de colaborar con el gobierno estatal.

Adelantó que para subsanar la falta de elementos policiacos durante la evaluación y en caso de no lograr los 11 mil elementos requeridos, contarán con el apoyo de la federación, quien ha ofrecido cubrir aquellos espacios que queden temporalmente sin cobertura.