Las mujeres pueden votar

 

Por Chanssonier

 

Desde siempre los hombres fueron hegemónicos en el ejercicio del poder público, recayendo en ellos la responsabilidad de gobernar. Fue hasta el año de 1911 cuando en Noruega, después de una inagotable lucha cívica, finalmente las mujeres lograron votar y ser votadas. Ese mismo año en los Estados Unidos ellas lograron también ese derecho cívico, ahora generalizado en todo el mundo, habiendo féminas que gobiernan sus países.

Después de numerosas luchas cívicas, en México ellas lograron votar y ser votadas, en el curso del gobierno del presidente Miguel Alemán, limitándose su participación exclusivamente en elecciones municipales. En Guerrero en el curso de la administración del gobernador Alberto F. Berber (1937-41), fue alcaldesa Aurora Meza Andraca, por designación no por elección.

Finalmente el presidente de la República, Adolfo Ruiz Cortines, por decreto de fecha 17 de octubre de 1953, las féminas lograron votar y ser votadas en elecciones generales, lo que les ha permitido elegir gobernadoras, senadoras, diputadas y presidentas municipales. Ese mismo año llegó como diputada federal una bajacaliforniana; una nota periodística al respecto, apuntó que por vez primera la Cámara de Diputados, se había impregnado de un agradable olor a perfume femenino.

Con el correr de los años su presencia en cargos de elección popular, se ha incrementado notablemente. En el Congreso del Estado su número se ha elevado considerablemente; inclusive la Comisión de Gobierno, rectora de sus actividades, está encabezada por una de ellas. Su penetración política es indiscutible.

 

Hermosa ciudad de Taxco

 

Sin lugar a dudas la ciudad de Taxco (de Alarcón), es una de las poblaciones más atractivas de México; fundada sobre una serie de colinas da la impresión nocturna de ser un nacimiento, por los miles de focos que tal la hacen mirar. Por las mañanas sus tortuosas y estrechas calles, se llenan de gentes que caminan en distintas direcciones; la inmensa mayoría son empedradas, para no quitarle a la población su colonial sabor. Sus casas tienen techos de teja, aunque en los últimos años sus autoridades municipales han dado permisos para levantar edificios, que han venido a desentonar con su traza urbana.

Por cédula real expedida por el Rey Carlos V, el 17 de octubre de 1529, los capitanes Rodrigo de Castañeda y Miguel Díaz Aux fundaron el Real de Minas de Taxco, cuyos yacimientos de plata permitió a sus habitantes vivir en la bonanza.

Años más adelante la riqueza que obtuvo de las minas, le permitió a don José de la Borda construir de su peculio la bella iglesia de Santa Prisa, joya de la arquitectura churrigueresca, visitada por miles de personas al ir a Taxco. A partir de la terminación de la carretera, que lo une con la ciudad de México y otros lugares del país, aparejada al trabajo de la planta su principal actividad artesanal, se ofertó al turismo construyéndose hoteles para tal propósito.

Los festejos religiosos con motivo de la Semana Santa, está convertido en un evento de importancia, al que acuden miles de personas a presenciarlo, inclusive a participar.