* El Alto Comisionado en Derechos Humanos, Zeid Ra’ad Al Hussein dijo que en México se vive una gran crisis de derechos humanos, algo alarmante para un país que no está en guerra

 

* México no puede tener 98% de crímenes sin resolver, dijo, y respaldó la petición de expertos de la CIDH para que militares declaren por el caso Ayotzinapa

 

REDACCIÓN

 

MÉXICO, DF.— El alto comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Zeid Ra’ad Al Hussein, llamó al gobierno a actuar decisivamente sobre las recomendaciones que hizo el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes en el caso Iguala, incluyendo su insistencia de que las autoridades reviertan su decisión de no permitir que los expertos se entrevisten con integrantes del Ejército.

Agregó que tanto el GIEI como el equipo argentino de antropología forense arrojaron luz sobre las limitaciones e irregularidades relacionadas con los servicios forenses en México, por lo que “es preciso y urgente crear una institución nacional forense de carácter autónomo y con recursos adecuados”.

En conferencia de prensa, explicó que la razón por la cual pasó tanta atención en el caso de Iguala es que a la par del descubrimiento subsecuente de numerosas fosas comunes con cuerpos que resultaron no ser de los estudiantes desaparecidos, sino que son otras víctimas con perpetradores desconocidos.

“El caso de Iguala es un microcosmos de problemas crónicos que subyacen a la implacable ola de violaciones de derechos humanos que están teniendo lugar a lo largo de México y de manera particular pone de relieve el predominio de la impunidad e indiferencia por las víctimas que afectan al país entero”, dijo.

El alto comisionado puntualizó que la voluntad y la habilidad de las autoridades para enfrentar los crímenes violentos y la corrupción fueron puestas a prueba con el caso Iguala.

“Si el verdadero destino de los estudiantes se revela como resultado de una rigurosa investigación y el alto rango de perpetradores es identificado, procesado y sentenciado, incluyendo reparaciones a las víctimas, este terrible caso podría tener un efecto beneficioso en muchas otras situaciones en todo el país”, comentó.

Además, destacó que el caso de Iguala también ha resaltado la debilidad de la policía incluyendo su frecuente y directo involucramiento en la comisión de los crímenes.

“Si la policía no funciona adecuadamente, entonces el sistema de justicia en su conjunto corre el riesgo de ser disfuncional. El nuevo sistema penal tendrá que superar los problemas que enfrentan la policía y los forenses así como la debilidad el sistema de investigación”, dijo.

Zeid Ra’ad Al Hussein reconoció las medidas tomadas por el gobierno de México, pero dijo que los ciudadanos tienen que sentir el efecto de estas medidas, porque no se puede disfrutar de los derechos humanos si no se goza de la protección que otorga la ley.

“No podemos tener un país tan importante como México que tenga un porcentaje del 98 por ciento de delitos no resueltos”, dijo.

Por ello, también recomendó al gobierno mexicano fortalecer las procuradurías en el país para que las violaciones a derechos humanos sean investigadas en tiempo.

Además, solicitó fortalecer la capacidad de la policía para realizar las funciones de seguridad pública en línea con el respeto a los derechos humanos y contar con un manual en el uso de la fuerza, así como adoptar un cronograma para el retiro de los militares de las labores de seguridad.