Algunos de los pocos comerciantes que decidieron quedarse en las instalaciones de la Feria de San Mateo, Navidad y Año Nuevo, después del asesinato del presidente del patronato, Martín Roberto Ramírez Ruiz, comenzaron a desmontar sus establecimientos y marcharse del lugar.
El pasado 24 de diciembre, minutos antes de iniciar el tradicional “Teopancalaquis” fue asesinado en la plazuela del barrio de San Mateo, Martín Roberto Ramírez Ruiz, presidente del patronato de la feria, esto a un día de que iniciará formalmente está celebración en su edición 199.
Posterior a esto, mediante sus redes sociales, el patronato anuncia que los comerciantes que decidieron retirarse del recinto ferial podrían pasar a la oficina para recibir un reembolso, sin embargo, los comerciantes foráneos decidieron permanecer el lugar en espera de recuperar un poco de lo invertido tras su traslado a esta ciudad capital.
Esta mañana, haciendo un recorrido por las instalaciones de la feria, se pudo notar que los vendedores han comenzado a desmontar sus establecimientos montados con lonas y mayas.
En el lugar permanecen aún abiertos los locales de ropa, cobijas y los tradicionales trastes.
De manera anónima, uno de los trabajadores relató que lamentablemente después de estos hechos sus ventas bajaron hasta un 70%, sin embargo, y a pesar del temor por los hechos ocurridos, ellos decidieron permanecer y recuperar un poco lo invertido.
Expresaron que llevan más de veinte años acudiendo a la feria de San Mateo, Navidad y Año y es el primer año que sucede una situación como está, pero “Hay que buscar el pan y el sustento para la familia”.
Formalmente la feria termina el 6 de enero, sin embargo, agregaron que algunos de ellos aún permanecerán instalados hasta el día domingo, en busca de vender un poco más de sus producto.
Debido al asesinato del Ramírez Ruiz, se cancelaron todas las actividades culturales y musicales, así como también la tradicional misa de fin de año que se realiza en la plaza de toros “Belisario Arteaga”, así como también no llevaron a cabo ningún evento conmemorativo del día de reyes, como cada año.