MÉXICO. —En México, los principales problemas de salud mental son el alcoholismo, la depresión, la ansiedad, el estrés postraumático y el consumo de drogas, según explicó María Elena Medina-Mora Icaza, directora de la Facultad de Psicología de la UNAM, en una entrevista con Excelsior.
“El alcoholismo ocupa el primer lugar. Es una enfermedad de la que no hablamos mucho, y afecta tanto por el consumo como por la dependencia y gravedad de los casos”, detalló Medina-Mora. Además, destacó que la depresión y la ansiedad son cada vez más comunes, seguidas por el estrés postraumático y el abuso de sustancias, que ha mostrado un preocupante incremento.
Un dato alarmante es que estos trastornos están afectando a personas cada vez más jóvenes. La edad promedio en que comienzan los problemas es a los 12 años, y el pico más alto de incidencia ocurre alrededor de los 15 años. Según Medina-Mora, “el 51% de las personas que desarrollan un trastorno mental en su vida lo hacen en estas edades tempranas, lo que subraya la importancia de la prevención y tratamiento oportuno”.
En términos de género, las mujeres son más propensas a sufrir depresión y ansiedad, mientras que los hombres presentan más problemas de conducta y adicciones. Sin embargo, las diferencias entre ambos géneros se están reduciendo entre las generaciones más jóvenes. La doctora agregó que, si bien los hombres consumen más drogas y alcohol, las mujeres enfrentan un mayor estigma social cuando tienen estos problemas.
En el marco del Día Mundial de la Salud Mental, celebrado el 10 de octubre, Medina-Mora hizo un llamado a la conciencia sobre la gravedad de la situación: 3 de cada 10 adultos en México podrían padecer un trastorno mental. Aunque el acceso a la atención médica ha mejorado, más del 60% de las personas que sufren problemas de salud mental no reciben el tratamiento necesario debido al estigma y la falta de recursos.
María del Carmen Rigal, directora de la asociación civil Común Ati, también subrayó el papel crucial de las familias en la aceptación y búsqueda de ayuda para sus seres queridos. “Si no se recibe el tratamiento adecuado, estas personas se convierten en un riesgo social; pueden caer en la indigencia o incluso llegar al suicidio”, advirtió.
Rigal hizo un llamado a las familias a buscar apoyo y mencionó que su asociación ofrece atención gratuita en Monterrey ya a través de su página web para promover la rehabilitación cognitiva y la reinserción social de quienes padecen trastornos mentales.
La urgencia de atender estos problemas es clara, y tanto expertos como organizaciones piden a la sociedad derribar los estigmas para que las personas con problemas de salud mental puedan llevar una vida.