MÉXICO. —La Cámara de Diputados ha tomado una decisión firme para erradicar las comisiones adicionales en transacciones con tarjetas, marcando un hito significativo con la aprobación unánime de enmiendas a la Ley Federal de Protección al Consumidor. Estas modificaciones recientes establecen de manera clara la prohibición de cobrar a los consumidores comisiones extra al optar por pagar con tarjetas de crédito, débito o al realizar disposiciones de efectivo. Este cambio legislativo, respaldado por 446 votos a favor, pone fin a la práctica de los proveedores de bienes y servicios de imponer comisiones que anteriormente fluctuaban entre el 3% y el 5% del valor total de la compra.

El dictamen, ahora en manos del Senado de la República para su revisión constitucional, representa un avance significativo en la protección de los derechos de los consumidores. Previamente, la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) había advertido sobre la práctica de algunos establecimientos comerciales de aplicar estas comisiones, lo que motivó la reforma legislativa.

En cuanto a las consecuencias para aquellos que infrinjan la nueva disposición, la ley establece sanciones económicas severas. Las multas oscilan entre 701.15 pesos y 2 millones 243 mil 671.49 pesos, con el objetivo de desalentar a los establecimientos de continuar con esta práctica considerada abusiva por la Condusef. Esta medida no solo busca promover la equidad en las transacciones comerciales, sino también fortalecer la confianza del consumidor en los sistemas de pago electrónicos.

La eliminación de las comisiones en transacciones con tarjetas no solo es beneficiosa para los consumidores, al evitar que paguen más de lo debido, sino que también tiene un impacto positivo en los comercios. Aunque algunos negocios consideraban estas comisiones como una forma de compensar los costos asociados con el uso de terminales punto de venta, la Condusef argumenta que los beneficios de aceptar pagos electrónicos superan ampliamente esos costos.

En una época en la que la preferencia por el pago con tarjeta sobre el efectivo es cada vez más evidente, esta práctica de cobro de comisiones había comenzado a dañar la reputación de negocios de todos los tamaños, desde tiendas de conveniencia hasta panaderías.